Cada vez más encontramos etiquetas rosé en vinotecas y restaurantes que amplían la gama de colores de nuestra bebida nacional.
Considerado siempre algo especial y de refinamiento, esta bebida delicada, estimulante y de aromas intensos es el producto de una elaboración esmerada y de mucha complejidad.
Tomando como ejemplo la región de la Champaña francesa, en nuestro país se elaboran espumantes blancos con una mezcla de uvas blancas y tintas, comúnmente la blanca Chardonnay y la tinta Pinot Noir, método en el cual se separa rápidamente la pulpa de los hollejos evitando que las de color tiñan el mosto.
Cuando se produce un espumante rosado, puede ser sólo de uva tinta con un breve contacto con la piel hasta extraer color o, también, se pueden elaborar por separado el vino blanco y los vinos tintos y luego agregan cantidades controladas de los tintos hasta conseguir el nivel de pigmentación deseado.
En varios países del Nuevo Mundo, donde se ubica Argentina, los rosados se elaboran comúnmente con Pinot Noir, casi sin presencia de uvas blancas.
Pero también podemos encontrar casos de otras variedades tintas que aportan mayor complejidad y le dan una nota de singularidad. Cada productor tiene la posibilidad de dar un toque diferente mediante la mezcla de sus variedades así como el porcentaje de composición.
Considerado un aperitivo maravilloso, ya que posee frescura y una estructura delicada, el espumante rosado es sinónimo de refinamiento y buen gusto.
Los hay delgados y redondos, frutados y aromáticos, frescos y maduros, dulces y secos, jóvenes y muy desarrollados, caros y baratos en este caso solo sirve el asesoramiento por un sommelier o un vendedor experto que nos ayude a encontrar esa botella que estamos buscando
Haciendo un análisis sensorial lo notaremos en muchos casos de aromas expresivos, vigoroso y frutado.
A diferencia de un vino tranquilo (sin presencia de gas carbónico), los vinos espumantes deben apreciarse no sólo por los aromas y sabores, sino también por las burbujas.
Una señal de impecable ejecución es el tamaño y la constancia de las mismas.
Deben ser muy finas y pequeñas, y ascender de forma suave y continua hacia la parte superior de la copa.
Si a estos componentes le agregamos el color levemente rosado, el impacto siempre será mayor.
Me animaría a decir que, para muchos, un espumante rosé es sinónimo de glamour, elegancia y romanticismo.
Los recomendados
Cavas Rosell Boher - $165
100% Pinot Noir De atractivo rosado pálido, burbujas que ascienden sabiamente hacia la superficie de la copa, intensos aromas frutales, levaduras y pan tostado complejo, buen cuerpo, fresco y con buena acidez, largo y equilibrado. En boca presenta una mousse de gran delicadeza y armonía. Un espumante elaborado con paciencia y sabiduría, con 30 meses en borras finas. Un lujo indiscutido de la industria nacional.
Baron B Brut Rosé - $116
Chardonnay, Pinot Noir y Malbec Hermoso color salmón brillante, aromas de refinado mix de frutas rojas, ciruela y casis, frutos secos y crema de nuez. El paladar es exquisito y refinado muestra caracteres de frambuesa, frutilla y rosas, con un acabado de estructura firme y bien definido. Un clásico que se destaca y se mantiene en el tiempo.
Bodega del Fin del Mundo Rosé - $ 110
100% Pinot NoirAtractivo color salmón rosado brillante, marcado aroma de fruta madura, fruto de cerezos, con marcado carácter de levadura. En boca es de textura cremosa, elegante y redondo con acidez natural fresca. Tiene 18 meses en contacto con borras. La identidad de los viñeros del sur, vinos elaborados con pasión.
Escorihuela Gascon Pequeñas Producciones Rosé - $ 150
100% Pinot NoirMetodo Champenoise con 18 meses de levadura. Aromas a castañas de cajú, masa de pan, tostadas y algo de rosas. En el paladar las notas frutales son protagonistas, se desarrolla cremoso, complejo y bien estructurado. Pequeñas producciones de inmensa calidad.
Alta Vista Atemporal Rosé - $ 85
Pinot Noir y ChardonnayDe atractivo color rosa pálido, perlado de ascendencia continua, en nariz es fragante y perfumado aparece la fruta roja generosa. En boca es de excelente textura, suave y con peso. Intenso y de buen sabor, su acidez chispeante lo hace irresistible. Refinado y de buen final.
Fuente. iprofesional.com
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