La carrera
tiene infinidad de beneficios y así lo hemos destacado siempre en
Vitónica. Pero si nos paramos a analizarlos seguro que destacamos los
beneficios cardiacos y respiratorios que nos aporta. Aunque en esta
ocasión vamos a hacer un repaso por otros beneficios que casi nunca tenemos en cuenta, pero que son igual de buenos para nuestro organismo.
En primer lugar hay que tener presente que la carrera activa la circulación y este simple hecho tiene un sinfín de efectos en el organismo. Uno de los más sorprendentes es el fortalecimiento de las articulaciones,
ya que las ofreceremos los nutrientes necesarios y las estimularemos
para producir las sustancias necesarias para permanecer es perfecto
estado.
Incidencia de la carrera en los músculos
Este mismo efecto tendrá la carrera sobre los músculos y la recuperación de los mismos,
ya que al activar la circulación lo que conseguiremos será que los
músculos reciban muchos más nutrientes de manera directa, lo que les
ayudará a recuperarse más fácilmente y a estar en plena forma en todo
momento, además de que conseguiremos mantenerlos más jóvenes.
Un cerebro más activo
Esta activación de la circulación tiene algún que otro efecto más en el organismo. Uno que no podemos pasar por alto es la activación del cerebro y su actividad.
Al mejorar la circulación activaremos también la irrigación de esta
parte fundamental del organismo. Esto se acabará traduciendo en mejoras
cognitivas y aceleración de los procesos mentales, así como el retraso
del envejecimiento cerebral.
Huesos de acero
El efecto que la carrera tendrá en la densidad ósea
también es destacable, ya que al aumentar y mejorar la capacidad
muscular también lo hará la de nuestros huesos. Lo que nos dará la
carrera será unos huesos más fuertes y resistentes. Si practicamos una
carrera segura, libre de impactos y golpes conseguiremos unos huesos
mucho más resistentes, lo mismo que unas articulaciones mejores.
Siempre contentos
A nivel psicológico también correr tiene un sinfín de beneficios, y
es que nos ayudará a acabar con el estrés. Está comprobado que el
deporte nos mantiene más felices a causa de las
endorfinas que nos ayudará a liberar, pero además el ejercicio aeróbico
acentúa esto más, pues además de aliviar tensiones nos ayudará a
oxigenar el organismo y conseguir un perfecto equilibrio de todas las
partes que lo componen, además de aportarnos tranquilidad.
Fuente: vitonica.com
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