A China, todo lo que lleve la palabra "Francia" le parece interesante.
Por otro lado, para la gente de este valle donde se producen los "côt" o
Malbec franceses, Argentina y sus vinos, son casi una leyenda.
La gran extensión de campos verdes que
separa la Provénce del Valle Sur Central donde se encuentra el Valle del
Lot, la región que en Francia implanta Malbec, es al menos, majestuosa.
El camino nos guía a través de una verdadera alfombra de jardines que
ostentan distintas tonalidades de verde, campos de maíz y casas de
piedra; molinos de aspas estilizadas dominan las colinas y la
temperatura desciende cuando comenzamos a adentrarnos en los campo.
Atrás quedaron Languédoc, el Mediterráneo y el sol. Ahora llueve sobre
la campiña francesa. Vamos en busca de Cahors, la AOC que dio nacimiento a la cepa emblema de Argentina, el Malbec.
En
el grupo la intriga es grande; ¿cómo será? ¿qué tipo de vinos
encontraremos? ¿son muchos los productores? ¿cuántas hectáreas de
Malbec hay implantadas aquí? ¿Cahors es competencia para Argentina? No,
es la respuesta a esta última pregunta, al menos por ahora. Hay 4.000 hectáreas implantadas con Malbec en esta región (contra las 30 mil que tiene Argentina) y si bien el crecimiento fue importante desde los 70 cuando había sólo 300 hectáreas, la tasa de implantación de viñedos desde 2006 es nula. Cahors sufrió dos grandes crisis que atentaron contra la vitivinicultura: la primera fue la plaga de la phylloxera en1865 que acabó con 58.000 hectáreas cultivadas y la segunda, en 1956, fue una helada, que destruyó gran parte de los cultivos.
Hoy, gracias
a la fama del Malbec de Argentina, algo que la gente de aquí elogia con
mucho énfasis, la vitivinicultura regional renació.
"Sería
importante que una empresa argentina invirtiera en Cahors para poner
pie en Europa e impulsar el consumo del Malbec en todo el continente",
reflexiona Bertrand Vigoroux, dueño de Haute Serre y Chateau Mercuès,
dos bodegas de gran prestigio en la zona. Betránd fue uno de los
productores que impulsó el acuerdo entre la municipalidad de Luján de
Cuyo y la comuna de Cahors, acuerdo que no cayó bien a muchos bodegueros
argentinos.
Los franceses no entienden el por qué de la
resistencia argentina contra dicho acercamiento, aunque alguna sospecha
sobre la proveniencia de los celos puede aparecer cuando en sus libros
colocan "Cahors, la capital del Malbec".
"Somos muy pequeños en
relación a vosotros", apunta Arnaud, a cargo de la Ville Malbec de
Cahors, el moderno centro de degustación y visitas ubicado en el corazón
de la ciudad, que crearon los productores con fondos propios para hacer
conocer sus vinos
"No representamos una amenaza, reconocemos que Argentina es el líder en todo;
la comunicación que habéis hecho para hacer conocer el Malbec en el
mundo es fantástica, no tengo más que cosas buenas para decir sobre
Argentina, por eso no entiendo por qué tan fuerte es la reacción".
Conmigo está Felipe Stahlschmidt, enólogo de Catena Zapata. Juntos intentamos explicar que las históricas restricciones francesas al uso de nombres para tipos de vino, como Borgoña o Champagne, lógicamente generaron resquemores en productores de otros puntos del globo. "El celo argentino con el Malbec no es mayor que el celo francés en relación a nombres que se hacen famosos aquí", argumentamos.
Conmigo está Felipe Stahlschmidt, enólogo de Catena Zapata. Juntos intentamos explicar que las históricas restricciones francesas al uso de nombres para tipos de vino, como Borgoña o Champagne, lógicamente generaron resquemores en productores de otros puntos del globo. "El celo argentino con el Malbec no es mayor que el celo francés en relación a nombres que se hacen famosos aquí", argumentamos.
El debate es interesante ya que permite poner sobre el tapete una serie de asuntos. Rescato aquí el interés
que muestran los productores franceses de esta zona en realizar un
trabajo de cooperación franco-argentino en la difusión de Malbec en
Europa y sobre todo en Asia. "A China no le
interesa el varietal, pero sí Francia; nosotros podemos dar a conocer el
Malbec en China y esto nos beneficiaría a ambos", subraya Arnaud.
Nos
asombró la cálida recepción que nos dieron en Cahors, donde Argentina
se conoce y mucho. De hecho, apenas llegamos, el comentario fue que
había dos enólogos argentinos haciendo temporada en Cahors. Uno de
ellos, Santiago Mayorga, de Mendel, estuvo cenando con nosotros durante
la visita.
La AOC Cahors en cifras
Máxima producción: 50 hl/ha
430 productores en la AOC; 273 hacen su propio vino o venden su uva; 143 son miembros de una cooperativa
Ventas
165.000 hl fueron producidos en los últimos 5 años
60% del vino es a granel
85% del vino se vende en Francia (15% se exporta). Los clientes principales son el suroeste, París y la coste Oeste
430 productores en la AOC; 273 hacen su propio vino o venden su uva; 143 son miembros de una cooperativa
Ventas
165.000 hl fueron producidos en los últimos 5 años
60% del vino es a granel
85% del vino se vende en Francia (15% se exporta). Los clientes principales son el suroeste, París y la coste Oeste
lliers, hasta restaurateurs y "vignerons"
hablan aquí de nuestro país y aprecian el trabajo de los enólogos
argentinos, a los que piden su opinión e invitan a trabajar en sus
bodegas. Aún con sus increíbles castillos, sus campos verdes y una
situación económica estable y sólida, para la gente de Cahors (donde
sólo hay 20.000 habitantes). Argentina es sinónimo de paraíso, grandes extensiones de tierra, apertura, modernidad, mundo. Para reflexionar.
Fuente: Area del Vino
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