A través de Vinos sin Fronteras hemos conocido un peculiar viñedo situado en Tailandia, el reportaje hace referencia a unos viñedos situados concretamente a 50 kilómetros al suroeste de Bangkok. Se trata de Monsoon wines, bodega cuyos vinos son elaborados por el enólogo Laurent Metge Toppin.
Según Trotters de Vinos sin Fronteras, son unos vinos que distan mucho de lo que nosotros podemos conocer como vino y más si hay que maridarlos con platos de la cocina asiática. Indican que presentan falta de acidez y elegancia, quizás sea porque estos viñedos se encuentran sobre el agua.
Nos explican que los viñedos se encuentran franqueados por canales de agua y la recolección de las uvas se realiza en barcas, además, gracias al clima de la región, se realizan hasta dos vendimias por año.
El propietario de la bodega, el enólogo mencionado anteriormente, está muy ilusionado con los vinos que elabora, pero dudamos que tuvieran salida en la comunidad occidental y siendo Laurent consciente de ello, el negocio del vino allí se ha derivado a la elaboración de una mezcla de este vino con soda e hibiscus, dando lugar a una bebida llamada Spy de la que se elaboran 8 millones de botellas al mes y por lo visto triunfa en aquel país.
Nuestras felicitaciones y agradecimientos a Vinos sin Fronteras por compartir sus experiencias y mostrarnos cómo son los vinos en otros países.
Sin duda, la vendimia sobre una barca es muy peculiar.
Según Trotters de Vinos sin Fronteras, son unos vinos que distan mucho de lo que nosotros podemos conocer como vino y más si hay que maridarlos con platos de la cocina asiática. Indican que presentan falta de acidez y elegancia, quizás sea porque estos viñedos se encuentran sobre el agua.
Nos explican que los viñedos se encuentran franqueados por canales de agua y la recolección de las uvas se realiza en barcas, además, gracias al clima de la región, se realizan hasta dos vendimias por año.
El propietario de la bodega, el enólogo mencionado anteriormente, está muy ilusionado con los vinos que elabora, pero dudamos que tuvieran salida en la comunidad occidental y siendo Laurent consciente de ello, el negocio del vino allí se ha derivado a la elaboración de una mezcla de este vino con soda e hibiscus, dando lugar a una bebida llamada Spy de la que se elaboran 8 millones de botellas al mes y por lo visto triunfa en aquel país.
Nuestras felicitaciones y agradecimientos a Vinos sin Fronteras por compartir sus experiencias y mostrarnos cómo son los vinos en otros países.
Sin duda, la vendimia sobre una barca es muy peculiar.
Fuente: directoalpaladar.com
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