El dato surge de la comparación de dos estudios, uno hecho en febrero de
2010 y el segundo actualizado al día hoy. Los mayores incrementos son
de plantines y anexos, con un aumento del 118%.
Hoy, plantar un viñedo en Mendoza tiene un costo de $111.460 o 25.050 dólares por hectárea. Esto representa un incremento del 65% en pesos, en comparación al año 2010, cuando el valor era de $67.400. El cálculo surge de un modelo de costos elaborado por el ingeniero agrónomo Christian Tsallis.
Para el análisis, el profesional tomó como referencia un viñedo cabeceras de eucalipto, alambres de alta resistencia, tela antigranizo y plantas de pie franco. No están incluidos los costos del terreno, ingenieros, arquitectos, administrativos de finca, casa para vivir y otros gastos más relacionados con el mantenimiento de la plantación.
Otro aspecto a tener en cuenta, es que el viñedo modelo tiene una separación de 2,20 metros entre hileras y de 0,80 metros entre plantas. "Así se obtiene una población aproximada de 5.700 plantas por hectárea", aclaró Tsallis.
Al mantenerse las mismas condiciones, es posible comparar los valores que se darán a continuación, con los publicados por Área del Vino en febrero de 2010: http://www.areadelvino.com/articulo.php?num=20205. Solo cabe aclarar, que entonces el dólar se encontraba a $3,85, mientras que hoy los costos en dólares se multiplican por $4,45.
Los ítems y su participación
En diálogo con este medio, Christian Tsallis dijo estar sorprendido por los altos aumentos que han tenido algunos ítems en los últimos dos años. Por eso es válido analizar, no solo el costo actual, sino también el incremento porcentual en cada punto.
El caso más llamativo es el de los plantines y anexos (cañas y polainas), que hoy tienen un costo de $25.000 por hectárea y una participación en el monto total de 22,5%. En comparación a 2010, el valor se incrementó un 118%. Además, pasó a ser gasto más significativo, desplazando a la tela antigranizo al segundo puesto. Este insumo, representa ahora el 19,62% del total y requiere de una inversión de $21.800 (58% más que en 2010).
El tercer ítem más influyente es el equipo de riego, pero bajó su participación relativa en los últimos dos años, pasando de 17,14% (2010) a 13,61% (2012). El motivo, es su bajo incremento, que se mantuvo por debajo del índice de inflación. En el periodo de tiempo analizado, su valor subió 31%, alcanzando los $15.130 por hectárea.
La mano de obra de plantación cuesta hoy $11.440, lo que representa un aumento bianual del 66%. Para los obreros de postes y alambres, es necesario invertir hoy $12.320 por hectárea (65% más que en 2010).
La mano de obra, se divide en dos ramas: mano de obra para plantación y mano de obra de postes y alambres. Ambas se mantuvieron estables en cuanto a incidencia en el costo total (10,3% y 10,73% respectivamente). "Los aumentos en este caso, coinciden con los porcentajes que se acuerdan en paritarias", explicó Tsallis.
Por su parte, la madera, tuvo un incremento significativo del 103,6%. Su valor, que era de $6.600 hace dos años, hoy alcanza los $13.440. La participación porcentual refleja esta suba, alcanzando hoy el 12,09% y superando a los dos ítems de manos de obra.
En el caso de los alambres, el incremento de precios fue más discreto (48%). El valor actual es de $7.300 y su peso en el total es de 6,5%.
Finalmente, la preparación del suelo aumentó sus precios pero en muy baja proporción. Mientras que en la temporada 2010 valía $4.300 por hectárea, hoy se logra por $4.980. Su participación es del 4,5% y su incremento bianual es del 15%. Sobre este punto, el ingeniero agrónomo destacó que es el único valor que mantuvo estable en dólares. "Su valor en la moneda norteamericana es el mismo de hace dos años. Su incremento es del 0%", indicó.
Para el análisis, el profesional tomó como referencia un viñedo cabeceras de eucalipto, alambres de alta resistencia, tela antigranizo y plantas de pie franco. No están incluidos los costos del terreno, ingenieros, arquitectos, administrativos de finca, casa para vivir y otros gastos más relacionados con el mantenimiento de la plantación.
Otro aspecto a tener en cuenta, es que el viñedo modelo tiene una separación de 2,20 metros entre hileras y de 0,80 metros entre plantas. "Así se obtiene una población aproximada de 5.700 plantas por hectárea", aclaró Tsallis.
Al mantenerse las mismas condiciones, es posible comparar los valores que se darán a continuación, con los publicados por Área del Vino en febrero de 2010: http://www.areadelvino.com/articulo.php?num=20205. Solo cabe aclarar, que entonces el dólar se encontraba a $3,85, mientras que hoy los costos en dólares se multiplican por $4,45.
Los ítems y su participación
En diálogo con este medio, Christian Tsallis dijo estar sorprendido por los altos aumentos que han tenido algunos ítems en los últimos dos años. Por eso es válido analizar, no solo el costo actual, sino también el incremento porcentual en cada punto.
El caso más llamativo es el de los plantines y anexos (cañas y polainas), que hoy tienen un costo de $25.000 por hectárea y una participación en el monto total de 22,5%. En comparación a 2010, el valor se incrementó un 118%. Además, pasó a ser gasto más significativo, desplazando a la tela antigranizo al segundo puesto. Este insumo, representa ahora el 19,62% del total y requiere de una inversión de $21.800 (58% más que en 2010).
El tercer ítem más influyente es el equipo de riego, pero bajó su participación relativa en los últimos dos años, pasando de 17,14% (2010) a 13,61% (2012). El motivo, es su bajo incremento, que se mantuvo por debajo del índice de inflación. En el periodo de tiempo analizado, su valor subió 31%, alcanzando los $15.130 por hectárea.
La mano de obra de plantación cuesta hoy $11.440, lo que representa un aumento bianual del 66%. Para los obreros de postes y alambres, es necesario invertir hoy $12.320 por hectárea (65% más que en 2010).
La mano de obra, se divide en dos ramas: mano de obra para plantación y mano de obra de postes y alambres. Ambas se mantuvieron estables en cuanto a incidencia en el costo total (10,3% y 10,73% respectivamente). "Los aumentos en este caso, coinciden con los porcentajes que se acuerdan en paritarias", explicó Tsallis.
Por su parte, la madera, tuvo un incremento significativo del 103,6%. Su valor, que era de $6.600 hace dos años, hoy alcanza los $13.440. La participación porcentual refleja esta suba, alcanzando hoy el 12,09% y superando a los dos ítems de manos de obra.
En el caso de los alambres, el incremento de precios fue más discreto (48%). El valor actual es de $7.300 y su peso en el total es de 6,5%.
Finalmente, la preparación del suelo aumentó sus precios pero en muy baja proporción. Mientras que en la temporada 2010 valía $4.300 por hectárea, hoy se logra por $4.980. Su participación es del 4,5% y su incremento bianual es del 15%. Sobre este punto, el ingeniero agrónomo destacó que es el único valor que mantuvo estable en dólares. "Su valor en la moneda norteamericana es el mismo de hace dos años. Su incremento es del 0%", indicó.
Análisis comercial
Como los números muestran
con claridad, algunos ítems tuvieron aumentos muy elevados, mientras que
otros crecieron por debajo del ritmo de inflación. Para Tsallis, este
fenómeno se explica por la relación entre oferta y demanda.
"Aumenta la demanda de plantines y también de madera, mientras que otros ítems como equipos de riego y preparación de suelo, han bajado", apuntó.
A comienzos de abril, WineSur consultó a productores de plantines que aseguraron el mantenimiento de la demanda y remarcaron que se están haciendo nuevas inversiones. Aquí puede leerse el artículo: http://www.winesur.com/es/noticias/continuan-las-inversiones-en-plantines-para-la-vid.
Un segundo aspecto digno de análisis, es la pérdida de rentabilidad por parte de los productores. "Entre 2011 y 2012, el costo de mantenimiento de un viñedo subió un 28%, mientras que el precio de la uva se mantuvo. Estamos siguiendo un camino que no se puede aguantar mucho tiempo más", advierte el ingeniero que también es productor de uva y asesora a muchos emprendimientos productivos.
Para sanear el mercado, Tsallis opina que productores y bodegueros deben trabajar en forma conjunta y "entender que forman todos parte de un mismo equipo" y opinó que además de ajustar precio por el lado de la producción "es necesario presionar para que bajen los costos de otros insumos, que mantienen un mercado monopólico en Argentina".
Fuente: Area del Vino
"Aumenta la demanda de plantines y también de madera, mientras que otros ítems como equipos de riego y preparación de suelo, han bajado", apuntó.
A comienzos de abril, WineSur consultó a productores de plantines que aseguraron el mantenimiento de la demanda y remarcaron que se están haciendo nuevas inversiones. Aquí puede leerse el artículo: http://www.winesur.com/es/noticias/continuan-las-inversiones-en-plantines-para-la-vid.
Un segundo aspecto digno de análisis, es la pérdida de rentabilidad por parte de los productores. "Entre 2011 y 2012, el costo de mantenimiento de un viñedo subió un 28%, mientras que el precio de la uva se mantuvo. Estamos siguiendo un camino que no se puede aguantar mucho tiempo más", advierte el ingeniero que también es productor de uva y asesora a muchos emprendimientos productivos.
Para sanear el mercado, Tsallis opina que productores y bodegueros deben trabajar en forma conjunta y "entender que forman todos parte de un mismo equipo" y opinó que además de ajustar precio por el lado de la producción "es necesario presionar para que bajen los costos de otros insumos, que mantienen un mercado monopólico en Argentina".
Fuente: Area del Vino
No hay comentarios:
Publicar un comentario