miércoles, 12 de mayo de 2010

El durazno

Este jugoso, dulce, aromático y fresco regalo de la naturaleza, es una opción tentadora para este verano. Bien frió y maduro puede ser parte de nuestro desayuno, merienda o como postre en compota y repostería saludable, en estos calurosos días de verano.

El árbol del durazno es pequeño, con hojas en forma de lanza y flores rosadas, de la familia de las Rosáceas. Crece en zonas templadas y no es de larga vida. En nuestro país, Mendoza lidera la producción para consumo interno y exportación.


Nutrientes

Provitamina A (beta-caroteno), vitaminas del grupo B, vitamina C, vitamina E, potasio, magnesio, fibra vegetal. Todo en cantidades moderadas.
El durazno fresco es la mejor opción para su consumo y aprovechamiento de todas sus vitaminas, minerales y fibras.

Propiedades benéficas del durazno

Corazón: su composición es ideal en una alimentación para el corazón. Las vitaminas A, C y E, antioxidantes por excelencia, impiden el deterioro de las arterias conocido como arteriosclerosis. Las vitaminas del complejo B, son necesarias para las contracciones musculares del corazón.

Gracias a estas vitaminas y por su bajo consumo de grasa y sodio, el durazno está indicado en los siguientes casos:

Isquemia Lesiones valvulares Hipertensión Miocardiopatía (degeneración del músculo cardíaco)
Afecciones digestivas: es un laxante suave y de fácil digestión.
Afecciones renales: recomendado por sus características diuréticas.
Obesidad: como toda fruta es baja en calorías totales lo que hace posible que sea incorporado en un plan alimentario bajo en calorías.

No hay comentarios:

Publicar un comentario


Cascada Inacayal - Villa La Angostura - Patagonia Argentina