El Instituto de Medicina de los EEUU aseguró que las mujeres obesas pueden engordar mucho menos que lo recomendado para el embarazo e incluso adelgazar para cuidar su salud y reducir el riesgo de desarrollar complicaciones gestacionales.
Las embarazadas obesas podrían bajar de peso con dieta de manera segura, según sugiere un estudio publicado en la revista Obstetrics & Gynecology. El Instituto de Medicina (IOM, por sus siglas en inglés), que es un panel asesor del gobierno de los Estados Unidos, recomienda que las mujeres obesas aumenten entre 5 y 9 kilogramos (kg) durante el embarazo.
Eso es mucho menos que los 6,8 a 11 kg recomendados para las mujeres
con sobrepeso y los 11 a 15,8 kg para las mujeres con peso normal. Pero algunos
expertos consideran que las guías del IOM no son suficientes y que por
lo menos las mujeres obesas pueden engordar aún mucho menos o hasta
adelgazar en el embarazo para cuidar su salud y reducir el riesgo de desarrollar ciertas complicaciones gestacionales.
La realidad es que muchas mujeres obesas engordan mucho más de lo recomendado
y ensayos clínicos pequeños comenzaron a buscar cómo ayudarlas a
controlar esos kilos de más. Ahora, un equipo combinó los resultados de
cuatro de esos ensayos, todos sobre consejos nutricionales, y halló que las embarazadas obesas que hacían dieta engordaban 6,3 kg menos que aquellas que no recibían orientación nutricional alguna.
Y no halló pruebas de que el asesoramiento o el adelgazamiento
alteraran el peso del bebé al nacer. Además, engordar menos ayudó a las
mujeres a cumplir con las recomendaciones del IOM, según indicó el
equipo de Julie A. Quinlivan, de Ramsay Health Care, en Joondalup, Australia.
El doctor Raul Artal, responsable del área de obstetricia,
ginecología y salud de la mujer de la Escuela de Medicina de la Saint
Louis University, es uno de los críticos de las guías del IOM para las
embarazadas obesas. “Creo que son muy generosas”, dijo a Reuters Health.
En un estudio, Artal pudo comprobar que las mujeres obesas
pueden mantener su peso de manera segura e incluso adelgazar hasta 5 kg
sin influir en el peso del bebé al nacer, que es la principal preocupación asociada con el control del peso durante el embarazo.
Las mujeres obesas corren más riesgo de desarrollar una serie
de complicaciones del embarazo, como diabetes gestacional, hipertensión
y nacimiento de bebés de talle mayor a la normal, lo que suele
forzar a una cesárea. Además, el estudio de Artal halló evidencia de
que cuando las mujeres obesas mantienen su peso o adelgazan durante el
embarazo, no sólo no alteran el desarrollo fetal, sino que hasta
reducirían el riesgo de tener un bebé con talla más grande que la
normal.
Pero eso no significa que las embarazadas obesas tengan que iniciar
la última dieta de moda. Los cuatro ensayos revisados en la
investigación actual incluyeron un total de 537 mujeres, que al azar
recibieron una intervención nutricional supervisada o formaron un grupo
de control.
El primer grupo recibió orientación para comer saludablemente y llevó
“diarios” alimentarios o registros de las calorías diarias consumidas.
Artal recomendó que las mujeres obesas que quieran controlar cuánto
engordarán en el embarazo lo hagan siempre bajo supervisión médica.
Fuente: Reuters
No hay comentarios:
Publicar un comentario