A veces, los mejores inventos no necesariamente tienen que ser los más difíciles de hacer. Un técnico en Electromedicina español, aficionado al vino, descubrió que el uso de tintas termocromáticas (que cambian de color según la temperatura ambiente) era la solución para saber si un vino estaba a la temperatura óptima para ser tomado.
"Pensé que tenía que haber algo más sencillo que un termómetro digital para medir la temperatura", dijo José Vicente Sanz Martínez, inventor del sistema que seguramente va a revolucionar el mundo del vino, según informa Lanza Digital .
El invento de Sanz Martínez consiste en pintar las cápsulas de vino (la parte que recubre el cuello de la botella) con estas tintas especiales. De esta forma, según el inventor, "si la temperatura óptima de un vino es de 16 grados, la tinta cambiará de color cuando alcance esa cifra".
Información provista por Piano15
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