Más allá de Twitter, de los flashes y de las frases rimbombantes... el ascendente enólogo Juan Carlos Muñoz es una rara avis en el mundo del vino: con perfil bajo y un trabajo sólido y consistente a lo largo de los años, ha logrado posicionar a su bodega familiar entre las más prestigiosas de la Argentina.
La base de la filosofía de Bodega Viña Las Perdices se apoya en dos variables principales: por un lado, alumbrar vinos con una buena relación calidad-precio. Por otro, no dejar de sorprender con una vuelta de tuerca, ya sea en el tipo de cepas utilizadas, el packaging o el estilo de vinificación.
Los lectores de Vinos & Bodegas iProfesional saben
del respeto que nos genera esta bodega. De la mano de un portafolio
sólido, asiduamente ocupa un lugar destacado en nuestras producciones de
vinos recomendados.
Su último hit fue un Albariño del segmento reserva que llegó al mercado en 2012 y que, en cuestión de meses, agotó las 6.000 botellas disponibles, transformándose de esta manera casi en un vino de culto.
Y lejos de quedarse quieto, Muñoz tiene en carpeta varios lanzamientos.
En diálogo con este medio, el enólogo adelantó que "en septiembre estaremos lanzando un rosado de Malbec.
La razón fue que teníamos una línea muy amplia de blancos pero ningún
rosado y creemos que este es el momento de avanzar en esa dirección".
Muñoz destacó que la característica más relevante de esta etiqueta próxima a salir al mercado "es el potencial de la fruta, de alta escuela, elaborado con prensa, con una maceración corta y con levaduras especiales".
De este modo, el enólogo recalcó el hecho de que no es una sangría, es decir, no es "lo que queda" de la elaboración de un tinto, sino que es un vino rosado concebido desde el inicio como un ejemplar de alta gama.
En este contexto, el enólogo aseguró que, de algún modo, viene a saldar una vieja deuda de
la industria vitivinícola nacional hacia este tipo de vinos: "En
general, el rosado no se elabora de la manera correcta. Además, es un
producto que se vende poco y está asociado a niveles de precios bajos.
No hay muchos consumidores dispuestos a pagar valores similares a los de
un tinto".
Frente a esto, destacó que "lo vamos a sacar dentro de nuestra línea varietal, entre los $60 y los $65 pero con una presentación especial, revalorizándolo, con una botella que no tendrá una etiqueta en papel, sino que contará con una pintura especial.
Se viene un aceite de oliva
Paralelamente, Viña Las Perdices también alumbrará su primer aceite de oliva.
La bodega familiar, que viene trabajando con viñedos propios desde hace cuatro décadas, también cuenta en Agrelo con una finca de olivares. Hasta ahora, venían comercializando la aceituna a terceros. Sin embargo, Muñoz consideró que "había llegado el momento de elaborar nuestro propio producto.
El aceite de oliva está transitando el camino que estaba atravesando el
vino hace 10 o 12 años. Ahora hay más consumidores, que empiezan a
entender más y se preocupan por las variedades".
La primera partida será pequeña, de unas 4.500 botellas. Se tratará de un corte en base a variedades como Frantoio y Arauco y saldrá al mercado bajo la marca paraguas "Cortijo El Olivar", emulando el nombre que poseía la finca que los padres de Muñoz poseían en Granada, España.
Llegará al mercado hacia la última semana de agosto y su precio rondará los $65 el medio litro. Además, adelantó que la presentación escapará a todos los formatos conocidos: "No vamos a utilizar ninguna de las botellas más difundidas. Seguramente va a gustar", se entusiasmó.
Sofisticando el consumo de espumantes
Paralelamente, Viña Las Perdices buscará darle un mayor impulso a la categoría de espumantes sobre borras, relanzando su Nature.
"No hace mucho habíamos lanzado un Nature, pero ahora estamos queriendo darle mucho más impulso.
Para ello estamos difundiendo nuestra última producción con nuevas
etiquetas y trabajando mucho con algunos restaurantes, entregándoles
también un pupitre especial para realizar el degüelle, ya que al tratarse de un espumante sobre borras la apertura no se realiza de la manera tradicional, sino que requiere de un cuidado muy especial", explicó el enólogo.
El manejo especial requiere, entre otras cosas, mantener la botella
48 horas hacia abajo y luego aplicarle frío para congelar las borras.
"Por ahora trabajaremos con diez restaurantes, pero el objetivo es ampliar el espectro. Igualmente, apuntamos a lugares especiales, que tengan servicio de sommellerie y que le dediquen tiempo y cuidado a este producto", acotó.
Vuelta de tuerca al Malbec y nuevas variedades
De cara a los próximos años, Muñoz adelantó que Viña Las Perdices irá sofisticando la elaboración del Malbec, que actualmente es el producto que más comercializan.
El plan es comenzar a trabajar por parcelas, cuadro por cuadro, dado que cuentan con viñedos que datan de hace 40 años y otros plantados más recientemente.
En cuanto a futuras etiquetas, la bodega contempla, en el corto plazo, comenzar a lanzar como varietales algunas de las cepas que actualmente componen su vino ícono, Tinamú.
"Vamos a incursionar con un Cabernet Franc y un Petit Verdot
como varietales. Tenemos la materia prima, que es de primerísima
calidad, pero estamos definiendo temas vinculados con la
comercialización. Por eso creemos que recién estaríamos lanzándolo después de 2014", adelantó.
En lo que respecta a los "fríos" números, Viña Las Perdices actualmente está produciendo unas 700.000 botellas, con un formato sumamente equilibrado, dado que la mitad se exporta y la otra mitad queda en el mercado interno.
"La meta que nos planteamos originalmente la seguimos manteniendo: las hectáreas que tenemos plantadas nos permitirían producir 1,5 millones de litros.
Por ahora estamos trabajando al 50% de la capacidad instalada. Por eso
la idea es crecer poco a poco y de manera sostenible", recalcó.
En este sentido, Muñoz destacó un hecho no menor: "La marca todavía
es joven. Aparecimos en el mercado en 2006, pero con mi padre venimos produciendo vinos desde mediados de los setenta. Tenemos una larga historia por detrás, nunca improvisamos y siempre supimos bien lo que hacíamos".
Por Juan Diego Wasilevsky - Editor Vinos & Bodegas iProfesional - vinosybodegas@iprofesional.com
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