Una de estas propiedades descubiertas recientemente es relativa a la enfermedad de diabetes, muy común en las personas, y la misma se caracteriza por unos bajos niveles de insulina en la sangre de quienes la padecen.
El componente que hace posible que el vino actúe sobre la diabetes es el resveratrol, el cual mejora la sensibilidad a la insulina de las personas enfermas de diabetes, haciéndolos progresar significativamente en la cura de su enfermedad.
Además de encontrarse en el vino, el resveratrol se encuentra en otros alimentos, como la uva o algunas plantas de la medicina tradicional china. Este dato es importante, puesto que el alcohol en exceso produce muchos problemas a las personas diabéticas.
Esta conclusión nace de un estudio realizado por científicos de la Academia China de las Ciencias, y fue llevado a cabo con ratones. Sin embargo, al ser tan sólo una suposición el hecho de que el resveratrol actúe de la misma manera en humanos que en ratones, no es recomendable tomar esto como un hecho ya comprobado, sino que tan sólo como una hipótesis con posible verificación.
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