La
mayor demanda de bebidas premium está impulsando una creciente oferta
de productos de lujo muy exclusivos. El grupo francés Pernod Ricard
acaba de traer una reducida partida al país de una de sus joyas, el
whisky escocés Royal Salute 62 Gun Salute, un blend que cuenta con un
mínimo de 40 años de añejamiento.
El producto, el más exclusivo del mercado local, será degustado por unos pocos amantes del whisky escocés, ya que cuesta nada menos que $ 15.000 al público.
“Es un producto de edición limitada a nivel
mundial; trajimos al país 30 botellas, de las cuales 23 están
prevendidas”, comentó Sebastián Nazabal Canalis, Embajador de Marca de
Pernod Ricard Argentina. Hasta el momento, el whisky más caro del
mercado local también pertenecía a la familia Royal Salute de Chivas
Brothers: el Royal Salute 38 años, que cuesta $ 4.600 y que comenzó a
venderse en la Argentina en 2009, con apenas 23 unidades, cantidad que
aumentó a 90 botellas el año pasado y a 390 este año, una oferta
ampliada en virtud de su buena demanda.
“La venta de whiskies de lujo, categoría que incluye a los que cuentan con más de 21 años de añejamiento, se duplicó en la Argentina en los últimos cuatro años, a 1.100 cajas de nueve litros, y ya capta el 4% del mercado total”, precisó Nazabal Canalis. En ese segmento, que factura unos $ 8,8 millones, figuran otros productos de Pernod Ricard, como Royal Salute 21 años ($ 1.050), Royal Salute Hundred Cask y Chivas Regal 25 años, además de otro de su competidor Diageo, Johnnie Walker Blue Label (21 años).
El alto valor del Royal Salute Gun 62 Salute tiene sus razones. El producto, creado para rendir tributo a las generaciones de la Casa Real inglesa, fue creado por Colin Scott, master blender de la Casa Chivas Brothers, con raros whiskies producidos por cuatro generaciones de Master Blenders de la misma Casa. Utiliza sólo whiskies que tienen un mínimo de 40 años de añejamiento, lo que constituye un alto costo de stock inmovilizado. Pero, más allá de su preciado líquido, la botella es de cristal, elaborada en forma manual por artesanos, bajo un diseño realizado por la casa renombrada mundialmente Dartington Crystal.
“Por el crecimiento del segmento de lujo, vamos incorporando más etiquetas exclusivas e, incluso, realizamos catas privadas para CEOs de empresas o clientes especiales”, comentó Nazabal Canalis.
Fuente: cronista.com
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