"Luego de haber vuelto de un viaje de dos años por el mundo queríamos encontrar la manera de poder compartir nuestra vivencia, exponernos de alguna manera, a que nos conozcan; lo que hacemos, lo que somos, lo que nos gusta. Así fue surgiendo la idea de abrir las puertas de nuestra casa los fines de semana para que la gente conozca nuestro espacio y hogar donde se fusionan el arte, la música y la gastronomía", cuenta Rosana una de las propietarias de La Cocina Discreta restaurante ubicado en el barrio de Villa Crespo.
Llegar es toda una aventura. ¿Será acá? se pregunta la gente al acercarse a la puerta ya que estos restaurantes puertas adentro no poseen carteles ni marquesinas que los identifiquen. "Principalmente nos conocen por el boca en boca que se da bastante tanto aquí dentro de Argentina como en el exterior. Además contamos con nuestra página web y varias notas en revistas o diarios nacionales e internacionales", agrega Rosana.
La cocina es una de las peculiaridades de este tipo de restaurantes, varía entre menúes exóticos, internacionales, nacionales y personalizados. "Los productos son frescos, todo casero y realizado en el momento", explica Malu Pizarro, chef de Caracoles para Da Vinci, situado en el Patio de la Reconquista, un antiguo edificio proveniente de fines del siglo XVIII en el barrio de Monserrat. "Nuestro carta se modifica cada semana, hacemos menúes temáticos, como para el día de los enamorados, para el Bicentenario o acorde alguna obra literaria", detalla Malu.
Nice food Gourmet, por su parte, propone variadas propuestas gastronómicas de excelente nivel. Ofrece un menú étnico de 7 pasos que permite sumergirse a fondo en las diferentes culturas gastronómicas del mundo. Sugiere también para los amantes del buen beber una amplia carta de bebidas y entre ellas la exquisita limonada de la casa.
Si te gusta la comida cubana Del Caribe posee un menú especialmente para vos, acompañado de un popurrí de música cubana y un espacio creado para fumar habanos y disfrutar con amigos.
El menú degustación es un común denominador en este tipo de espacios gastronómicos. Adhieren a la nueva tendencia de Slow Food, comer y disfrutar cada paso del menú, maridado con un buen vino, a cargo del sommelier de la casa.
Cada uno tiene un secreto para contar, una galería de arte para mostrar y un lugar para disfrutar de un buen momento. Pero para ello, es importante pedir reservas con anticipación, ya que estos restaurantes se manejan con un máximo de comensales, lo cual genera un trato altamente personalizado y un ambiente muy cuidado.
Fuente: viaresto.clarin.com
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