
A pesar de que el país atraviesa una severa crisis económica y financiera desde el año 2007, el consumo de vino no dejó de crecer, fenómeno que ya cumple 16 años de crecimiento ininterrumpido, según informa Vitisphere .
En el año 2009, el consumo de vinos creció un 0,8 por ciento, alcanzando las 297 millones de cajas de 12 botellas. Quienes sacan mayor provecho de esta suba son los vinos estadounidenses, cuyas ventas crecieron 1,8 por ciento, mientras que los vinos importados cayeron un 2,2 por ciento. Sin embargo, países productores como Argentina, Chile, Portugal o Nueva Zelanda lograron aumentar sus ventas a EEUU.
Fuente: Piano15
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