En el mundo, cerca del 80% de las mujeres sufre molestias gastrointestinales, pero pocas hacen algo para mejorar su calidad de vida. Especialistas remarcan que cambios simples en alimentación y estilo de vida generarían un gran impacto en el bienestar general.
Desde la Sociedad Argentina de Gastroenterología (Sage) aseguran que a
menudo la gente desconoce, malinterpreta o subestima la importancia de
una buena salud digestiva.
A la hora de pensar en el cuidado de la salud, en comparación con
problemas vinculados al peso, trastornos del sueño o problemas
cardiovasculares, los factores digestivos pasan inadvertidos y,
aunque tienen un alto grado de incidencia en el bienestar y en la
calidad de la vida de las personas, la mayor parte de la población los
ignora. Este tema fue abordado en el marco del Congreso Argentino de
Gastroenterología y Endoscopia Digestiva, que tuvo lugar en Mar del
Plata días atrás.
El doctor Luis María Bustos Fernández, médico gastroenterólogo,
director del Instituto de Gastroenterología que lleva su nombre y
ex-Secretario General de la Sociedad Argentina de Gastroenterología,
explicó que “las molestias digestivas impactan directamente sobre el bienestar y la calidad de vida.
Por eso es fundamental que quienes las padecen se acerquen a los
profesionales y hagan una consulta. Con pequeños cambios en la
alimentación y estilo de vida puede mejorar mucho la salud digestiva”.
La Organización Mundial de Gastroenterología (OMGE) es una federación
de más de 100 entidades que representan a más de 50 mil médicos de todo
el mundo, y de la cual forma parte la Sociedad Argentina de
Gastroenterología. Este año lanzó la campaña mundial denominada “Cuidá
tu Bienestar Digestivo” (Love Your Tummy es su nombre original en
inglés), con el objetivo de generar mayor conciencia, conocimiento y
manejo de la salud digestiva.
La campaña también contempló el desarrollo de materiales gráficos y
didácticos para que los profesionales de la salud compartan con sus
pacientes para que éstos se informen sobre la importancia del bienestar digestivo.
Bustos Fernández sugirió que la campaña ‘Cuidá tu Bienestar Digestivo’ intenta mostrar que, “en muchos casos, con
simples cambios en el estilo de vida, la alimentación, con el consumo
de productos lácteos fermentados con probióticos y tomando más agua, se
logra una mejor salud digestiva y, por consiguiente, un
bienestar físico y emocional, con lo cual es fundamental conocer el
propio sistema digestivo para comenzar con el cambio”.
El abdomen no sólo sirve para almacenar el combustible que le da
energía y nutrientes al organismo, sino que también, junto con el
intestino -señalado por muchos expertos como el segundo cerebro del
cuerpo- regula nuestro estado anímico. La serotonina, “la hormona del
bienestar”, es fabricada en un 95% por el intestino, lo cual confirma
que vivir con problemas estomacales leves, pero frecuentes, puede
producir un alto impacto en la salud física, social y emocional de la
mujer.
Al respecto, la doctora Silvia Pedreira, médica gastroenteróloga,
jefa del Servicio de Gastroenterología del Hospital Alemán, remarcó que “las molestias digestivas son un problema común para mucha gente
pero, a pesar de que el problema produce un claro impacto en la calidad
de vida de la persona, no todo el mundo hace algo para mejorar su salud
digestiva”.
Cualquiera puede sufrir estas molestias, según Pedreira: “Muchos
adultos manifiestan, en algún momento, síntomas gastrointestinales como distensión abdominal y alteraciones en el tránsito intestinal.
Si bien estos trastornos digestivos funcionales son capaces de producir
un alto impacto en la calidad de vida del paciente, los síntomas se
pueden manejar mediante cambios simples en la dieta y en el estilo de
vida”. La campaña ‘Cuida tu Bienestar Digestivo’ intenta colaborar con
el profesional de la salud y con el paciente para identificar síntomas
comúnmente asociados a problemas gastrointestinales y ayuda a descubrir
la mejor manera de manejarlos.
Además de ser una herramienta para el profesional, concluyó Bustos
Fernández, “la campaña apunta a destacar en la población general la
importancia una buena salud digestiva y su impacto en la salud en
general, para que el paciente realice los cambios necesarios”.
Estado de ánimo: El funcionamiento intestinal afecta
nuestro estado de ánimo más de lo que pensamos. El 72% de las personas
que sufren molestias digestivas esporádicas declara que esto las afecta
también a nivel emocional. El 31% dice no sentirse del todo bien, un 25%
dice que se pone de mal humor y un 15% dice no sentirse bien con su
apariencia.
Cerebro: La serotonina, la hormona del bienestar, es
fabricada en un 95% por el intestino. Éste puede catalogarse como un
órgano sensorial, ya que envía mensajes al cerebro. El sistema digestivo
alberga hasta 100 millones de neuronas, más de las que se pueden hallar
en la médula o en el sistema nervioso periférico.
Digestión general en números: Casi el 80% de la
población sufre de algún trastorno digestivo. Los síntomas más comunes
son: distensión abdominal (sensación de ‘hinchazón’), constipación y
flatulencia. El 86% de quienes padecen molestias digestivas manifiesta
que esto los afecta a nivel físico. Se siente incómodo (57%), siente la
ropa apretada (29%) y se siente con sobrepeso (27%). Un 75% de la gente
afectada por molestias digestivas manifestó que los síntomas tienen su
pico por la noche. Las molestias digestivas son doblemente más
frecuentes en mujeres que en hombres.
Distensión abdominal (hinchazón): La distensión
(sensación de hinchazón) es la molestia digestiva funcional más comúnvi y
afecta a un 36% de la población general. Con frecuencia, el paciente no
se siente distendido (‘hinchado’) por la mañana, sino que la sensación
aparece y se incrementa a lo largo del día.vi Luego de una comida
pesada, el abdomen del adulto tiene la capacidad de ampliarse hasta
cuatro veces su tamaño normal. A lo largo del día, la distensión
abdominal puede aumentar hasta 12 cm la circunferencia abdominal.
Constipación: La constipación afecta hasta a un 20%
de la población, es más común en la mujer y es más frecuente a mayor
edad. La parte final de la indigestión (el tránsito a través del colon)
toma entre 30 y 40 horas. Cuando el tránsito se hace más lento, se habla
de constipación.
Recomendaciones generales sobre alimentación y estilo de vida:
1. Coma menos cantidad y con mayor frecuencia, sin aumentar la ingesta calórica total. No saltee el desayuno; no coma en exceso por la noche.
2. Consuma alimentos ricos en fibra: 5 porciones de frutas y verduras por día, incluyendo granos y legumbres.
3. Coma pescado entre 3 y 5 veces por semana.
4. Reduzca el consumo de comidas con alto contenido de grasa animal, alimentos grasos y fritos.
5. Consuma productos lácteos fermentados con probióticos.
6. Opte por comidas magras como pollo (sin piel), conejo, o coles magros de carnes rojas.
7. Beba 2 litros de agua por día y disminuya el consumo de bebidas alcohólicas, con cafeína o con alto contenido de azúcar.
8. Coma despacio y mastique lentamente y bien.
9. Lleve un estilo de vida saludable: haga ejercicio regularmente y no fume.
10. Mantenga un índice de masa corporal saludable; propóngase mantenerse en su peso ideal.
Fuente: saludable.infobae.com
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