Zuccardi redobla la apuesta por el terroir de la mano de una nueva etiqueta de la línea Aluvional

Mientras parte de la industria vitivinícola nacional se embarca en el debate sobre la importancia de comenzar a comunicar el terroir y hacer hincapié en la diversidad de suelos, hay un puñado de bodegas que picaron en punta y actuaron en consecuencia.

Una de ellas es Familia Zuccardi, que este martes presentó en sociedad una nueva etiqueta: Aluvional El Peral Malbec 2009, la cual tiene varias particularidades para destacar.

En primer lugar vale mencionar que hasta antes de este lanzamiento, Aluvional sólo estaba compuesto por un único vino: La Consulta Malbec. De modo que, a partir de la llegada de este nuevo integrante, esta marca oficialmente pasó a ser una línea.

En segundo lugar, esta nueva etiqueta, que tiene un precio sugerido de $500 en vinotecas, refuerza el objetivo de la bodega de profundizar y sofisticar aun más la comunicación del concepto "microterroir", hilando de manera cada vez más fina y ofreciendo propuestas superadoras a un consumidor cada vez más exigente.

Una muestra de la preponderancia que tiene el terroir en general y el suelo en particular en esta línea, es que en el frente de la etiqueta no se especifica que se está ante la cepa estrella de la Argentina.

Al respecto, el joven enólogo Sebastián Zuccardi destacó que "Aluvional siempre va a ser Malbec, pero la idea es demostrar el potencial de la variedad en diferentes regiones".

"A esta altura no alcanza con comunicar la variedad. Es importante empezar a hablar del lugar y encontrar el potencial que cada cepa puede tener en terruño determinado", acotó en una degustación organizada para la prensa especializada. 

Acto seguido, el enólogo hizo hincapié en que "es cierto que hay un segmento del mercado que no está interesado en el concepto del terroir. Sin embargo, hay un pequeño grupo de consumidores que sí buscan un diferencial. Y esta línea de vinos tiene como objetivo darle una respuesta a esa demanda".

Bajo la óptica de Sebastián Zuccardi, que viene de sorprender con el recién lanzado Tito -y que apunta a convertirse en uno de los vinos más interesantes de este 2013-, para la industria vitivinícola nacional será clave apuntalar el concepto de terroir pero sin pretender construir una identidad de la noche a la mañana.

"Cuando hablamos de hilar más fino y destacar el valor del terruño sabemos que requiere tiempo, no se puede pretender hacer todo en dos o tres años. Puede llevar incluso una o dos generaciones. No por nada Borgoña necesitó de varios cientos de años para ser lo que es hoy en día", sintetizó Zuccardi.

Ya ingresando en la esencia de los dos ejemplares englobados bajo el paraguas de Aluvional, cabe destacar que los técnicos de Zuccardi no sólo analizaron componentes fundamentales del terroir, como el clima y la composición del suelo, sino que, incluso, fueron un paso más allá, analizando de manera minuciosa el origen del mismo.

"Los suelos de Mendoza son de origen aluvional. Y la idea es que esto esto sea un nexo, un hilo conductor que una todas las cualidades que los mismos pueden dar dependiendo de las regiones", acotó.  

Así fue como, en el caso de La Consulta, seleccionaron viñedos puntuales en esa microrregión dentro del Valle de Uco, los cuales fueron plantados en 1974 y que se caracterizan por desarrollarse en suelos donde se encuentran importantes depósitos de material rocoso, con abundante presencia de carbonato de calcio, lo cual deja una marca indeleble en el desarrollo de la cepa.

Ya en el caso de Aluvional El Peral, se escogieron viñedos centenarios, plantados en 1917, y ubicados en esa micro-región del Valle de Tupungato, a unos 1.150 metros sobre el nivel del mar. El suelo es areno-limo-arcilloso, profundo, con bajo contenido de material orgánico y levemente alcalino. 

En cuanto al trabajo en bodega, ambos vinos fueron fermentados con levaduras indígenas y trabajados, antes de llegar al roble, en piletas de cemento.

"Se acabó el tanque de acero en la alta gama. El acero termina haciendo vinos más nerviosos, en cambio, estas piletas de horrmigón producen menos variaciones de temperatura y hasta -aseguró Sebastián-, permiten una microoxigneación, por más que las paredes sean de 18 centímetros".

A la hora de abordar Aluvional El Peral 2009, Vinos & Bodegas se encontró con un vino cuyo perfil se orienta más a la fruta negra, dejando en segundo plano lo floral. La madera, como exige en este segmento de precios, está muy bien integrada, aportando algo de tabaco y vainilla. En boca ataca musculoso y se destaca por su gran amplitud y grasitud. La acidez está un nivel por encima de Aluvional La Consulta, lo que le confiere más filo y brío y, a su vez, redunda en un estilo más fresco si bien conserva la estirpe de vino elegante y de muy alta gama.

Lo interesante es que por el momento no habrá nuevas añadas de Aluvional El Peral, dado que el clima que sí favoreció la cosecha 2009, no jugó tan a favor en las siguientes.

"La idea es no estar obligados a hacer todos los años un Aluvional de El Peral y otro de La Consulta. Sino que bajo esta línea cada año sólo se presenten los vinos que mejor reflejan la pureza del lugar", acotó Sebastián. 

"Son vinos equilibrados, no son vinos pretenciosos, por más que valgan $500", remató, con sinceridad y mucha claridad, el enólogo.

Y, a modo de adelanto, se animó a mostrar las añadas 2013 de Malbecs de Altamira, Gualtallary y Vista Flores, recién sacados de las piletas de hormigón y que podrían formar parte, de cara al futuro, de esta línea llamada a dejar una marca en la vitivinicultura nacional. 

Por Juan Diego Wasilevsky - Editor Vinos & Bodegas iProfesional - vinosybodegas@iprofesional.com

 

Fuente: iprofesional.com