La cultura gastronómica de Belém extrae los colores, olores y sabores
nativos de una cocina que es rica y exótica, gracias a la mezcla de
influencias externas.
Cada uno de los platillos, ingredientes, sabores y olores de la cocina
de Belém nos invitan a descubrir la mezcla de influencias portuguesas,
alemanas, italianas, hispanoamericanas, indígenas y africanas. En la
cocina verás ingredientes de distintos tipos como carne de yacaré
(caimán) o de pato salvaje, y pescados de agua dulce y salada. En Belém
los condimentos evocan el aroma silvestre, intensificando los sabores y
olores de la cocina regional. Entre los platillos típicos de Belém
podemos encontrar “Pato no Tucupi” elaborado con pato cocido en salsa
con jugo de mandioca (también conocida como yuca) y sazonado con jambu o
saúco. El platillo “Vatapá” elaborado con pan rallado, jengibre,
pimienta-malagueta, cacahuates, leche de coco, aceite de palma y
cebolla, de consistencia cremosa, suele servirse con camarones o pescado
o carne de ternera, y acompañado de arroz. Un platillo de origen
indígena muy conocido es “Maniçoba”, elaborado con hojas de yuca molidas
y cocidas, al que se le agrega carne de cerdo o de cabra, acompañado de
arroz, harina de mandioca y pimienta.
Las bebidas no pueden faltar en una cocina tan llena de sabores y texturas. La Cachaça (cachaza) se obtien de la destilación de la caña de azúcar y es muy consumida al igual que la cerveza. El guaraná por su parte, es una bebida que se prepara con frutas particulares del Amazonas. El café es una de las bebidas más apreciadas y suele acompañarse de un malvavisco Garoto después de una comida.
En Belém tienen el privilegio de disfrutar exóticas frutas como mango, maracuyá, cajú, plátano, etc. Entre los postres más tradicionales podemos mencionar el “Quindim”, de intenso color amarillo, preparado con yema de huevo, azúcar y coco rallado. El “Papo de Anjo” preparado con yemas de huevo, agua, azúcar, extracto de vainilla y bañadas en almíbar, suele acompañarse con té.
Belém cuenta con una amplia gama de opciones en restaurantes, pero si deseas probar la comida típica regional, en Boteco das Onze podrás deleitarte con los platillos más tradicionales de la región.
Las bebidas no pueden faltar en una cocina tan llena de sabores y texturas. La Cachaça (cachaza) se obtien de la destilación de la caña de azúcar y es muy consumida al igual que la cerveza. El guaraná por su parte, es una bebida que se prepara con frutas particulares del Amazonas. El café es una de las bebidas más apreciadas y suele acompañarse de un malvavisco Garoto después de una comida.
En Belém tienen el privilegio de disfrutar exóticas frutas como mango, maracuyá, cajú, plátano, etc. Entre los postres más tradicionales podemos mencionar el “Quindim”, de intenso color amarillo, preparado con yema de huevo, azúcar y coco rallado. El “Papo de Anjo” preparado con yemas de huevo, agua, azúcar, extracto de vainilla y bañadas en almíbar, suele acompañarse con té.
Belém cuenta con una amplia gama de opciones en restaurantes, pero si deseas probar la comida típica regional, en Boteco das Onze podrás deleitarte con los platillos más tradicionales de la región.
Fuente: pricetravel.com.mx
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