Un didgeridoo, usualmente, mide entre 6 y 12 cm de diámetro, y su largo puede variar desde aproximadamente 50 centímetros hasta dos metros o más. El largo del instrumento determina la gravedad de su sonido (mientras más largo más grave suena). Algunos presentan un ensanchamiento en su boca inferior, semejante a una trompeta. Muchas veces, la boca superior, por la cual se sopla, presenta una cubierta de cera de abejas para prevenir la irritación de los labios a causa del roce.
Una de sus particularidades es que se puede tocar durante un tiempo ilimitado mediante una técnica denominada respiración circular, que consiste en mantener continuamente una cierta presión de aire en la boca, inhalando aire por las fosas nasales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario