Me encanta el pan dulce.
Es adictivo para mí, prefiero no empezar a comer porque luego me cuesta
parar. Pero en casa le gusta a todo el mundo, entonces hice un pan
dulce, más bien dos, ya que con la medida que les voy a pasar salen dos
panes de medio kilo cada uno. Yo usé la panificadora para mezclar y
levar, y cuando se cumplieron los tiempos, los pasé a un molde redondo y
más bajo que el tradicional, y lo cociné en el horno eléctrico.
Ingredientes
Leche tibia, 200 cc
Ralladura de 1 limón
Esencia de vainilla, 3 ó 4 tapitas
Frutas secas y abrillantadas, 1/2 kilo
Yemas, 3
Harina 000, 1/2 kilo
Azúcar impalpable, 140 grs
Manteca, 120 grs
Sal, 1/2 cdta
Levadura seca, 2 cdtas y media más
Preparación
Mezclar en el bol de la panificadora la leche tibia, las yemas, la
esencia de vainilla y la ralladura de limón. Agregar a continuación la
harina, previamente cernida, cubriendo toda la superficio del líquido, y
distribuir el azúcar en dos esquinas opuestas del molde.
Cortar la manteca en cubitos y colocarla en las otras dos esquinas,
junto con la sal. Luego realizar un hueco en el centro y poner allí la
levadura. En mi panificadora hay que marcar el programa 3 (fíjense uds
cuál corresponde en la que tienen ustedes).
La máquina comenzará a mezclar y amasar, luego se detendrá y hará un
primer levado y despues, pitido mediante, vuelve a amasar. Este es el
momento para incorporar frutas secas y abrillantadas.
En mi caso, 55 minutos antes de completar el tiempo, paré la máquina,
saqué la masa y la coloqué en dos moldes de papel de aluminio,
previamente enmantecados. Pinté con huevo batido y espolvorée con
azúcar. Cociné a 180 grados por 40 minutos en cada caso.
Opcional: bañar con glacé y decorar con frutas abrillantadas
Fuente: blogs.lanacion.com.ar/cocina-amateur
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