Con los días calurosos el menú se orienta hacia comidas más suaves y
light. Este postre de kiwi y frutillas, una dulzura deliciosa, es la
solución. ¿La originalidad del postre? La combinación de gelatina a
punto jarabe con el merengue, logrando una textura que se puede apreciar
desde la cucharada inicial.
Ingredientes (6 porciones):
4 unidad/es de huevo
3 cucharada/s de agua caliente
1 cucharadita/s de esencia de vainilla
5 cucharada/s de leche en polvo
1.5 cucharadita/s de polvo para hornear
3 cucharada/s de casancrem descremado
1 taza/s de kiwi en rodajas
0.5 taza/s de frutillas
3 cucharada/s de mermelada de frutilla
1 sobre/s de gelatina de frutillas
4 unidad/es de clara
1 pizca/s de sal
Preparacion:
Batir las yemas con el agua caliente, hasta que estén bien esponjosas. Aromatizar con la esencia de vainilla
Mezclar la leche en con el polvo para hornear. Unirlos a la preparación anterior. Batir las claras a nieve e incorporarlas suavemente a la mezcla de yemas
Verter en el molde. Cocinar en horno moderado de 18 a 20 minutos. Retirar, dejar asentar 10 minutos y desmoldar sobre una rejilla. Una vez que el postre esté frío, cortarlo al medio, en 2 capas
Untar una base de masa con el queso blanco, distribuir por encima los kiwis y las frutillas; salsear con la mermelada y tapar con el otro disco de masa. Aplanar un poco con las manos y llevar a la heladera una hora
Preparar la gelatina con la mitad del agua que indica en el envase. Dejarla enfriar y luego, llevarla a la heladera, controlando que no pase de punto jarabe
Batir las claras a nieve con una pizca de sal. Cuando estén bien firmes, sumarle la gelatina a punto jarabe en forma de hilo, sin dejar de batir
Cubrir el postre con el merengue, realizando ondulaciones con espátula. Mantenerlo en la heladera por lo menos hasta media hora antes de servir.
Mezclar la leche en con el polvo para hornear. Unirlos a la preparación anterior. Batir las claras a nieve e incorporarlas suavemente a la mezcla de yemas
Verter en el molde. Cocinar en horno moderado de 18 a 20 minutos. Retirar, dejar asentar 10 minutos y desmoldar sobre una rejilla. Una vez que el postre esté frío, cortarlo al medio, en 2 capas
Untar una base de masa con el queso blanco, distribuir por encima los kiwis y las frutillas; salsear con la mermelada y tapar con el otro disco de masa. Aplanar un poco con las manos y llevar a la heladera una hora
Preparar la gelatina con la mitad del agua que indica en el envase. Dejarla enfriar y luego, llevarla a la heladera, controlando que no pase de punto jarabe
Batir las claras a nieve con una pizca de sal. Cuando estén bien firmes, sumarle la gelatina a punto jarabe en forma de hilo, sin dejar de batir
Cubrir el postre con el merengue, realizando ondulaciones con espátula. Mantenerlo en la heladera por lo menos hasta media hora antes de servir.
Fuente: biencasero.com
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