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jueves, 18 de noviembre de 2010

Cuida tu hidratación en invierno


Es frecuente que con el cambio de clima, cuando los días se ponen más fríos y el sudor es menos notable en nosotros, nos despreocupemos un poco por la hidratación del cuerpo, sin embargo, las necesidades de líquido no se modifican grandemente y es fundamental mantener un adecuado equilibrio hidrico para rendir en todos los sentidos.

Por eso hoy recordamos la importancia de cuidar la hidratación en invierno, para lo cual no sólo es de ayuda lo que bebemos sino también lo que comemos, pues el 15-20% del agua proviene de los alimentos mientras que la mayor parte deriva de las bebidas.

En invierno, sentimos menos la necesidad de hidratarnos, nuestra sensación de sed es menor y como sudamos menos, tal vez creemos que podemos reducir la ingesta de líquidos, sin embargo, las necesidades no se reducen notablemente y es importante no esperar a tener sed para beber líquidos, pues cuando tenemos sed ya estamos levemente deshidratados.

Una pérdida del 3% del peso corporal en agua ya implica menor concentración, menor memoria y una baja notable en el rendimiento no sólo físico, sino también, intelectual. Por eso, no esperes a sentir sed, recuerda que las frutas, verduras, caldos, sopas y gelatinas pueden ayudar a hidratarnos en invierno y además, no olvides que puedes usar las bebidas para sentir un poco más de calor en el cuerpo.

Así como en verano usamos las bebidas para refrescarnos, en invierno podemos beber infusiones u otros líquidos calientes para sentir un poco más de calor y cuidar el nivel de hidratación del cuerpo.

Fuente. vitonica.com

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Los argentinos bebemos poca agua y mucho líquido azucarado


Tomamos los dos litros diarios que recomienda la OMS, pero sólo el 21% es agua pura. El resto son bebidas saborizadas o infusiones con azúcar, principalmente mate. De este modo, se consumen muchas calorías pero de baja calidad nutricional.

Mates con azúcar por la mañana. Un vaso de gaseosa durante el almuerzo, seguido por un café dulce. Jugos artificiales, aguas azucaradas y gaseosas durante el resto del día. Una combinación que frecuentemente practican los argentinos, sin percibir que consumen un montón de calorías encubiertas, según detectó una encuesta del Centro de Estudios sobre Nutrición Infantil (CESNI) sobre hidratación.

Se trata del primer estudio poblacional sobre hidratación realizado en la Argentina. Implicó el registro individual del consumo de alimentos, bebidas e infusiones sin alcohol durante una semana del mes de noviembre del año pasado. Participaron 800 personas, desde recién nacidos a 65 años, de los grandes centros urbanos del país.

El relevamiento fue presentado en el X Congreso Argentino de Obesidad y Trastornos Alimentarios que se llevó a cabo en Mar del Plata. Permitió identificar que las cantidades de azúcares ingeridos a través de jugos, bebidas e infusiones son preocupantes por sus riesgos para la salud. Dentro del total de los momentos de consumo diario de los encuestados, el 46% corresponde a líquidos. Y la mitad de los líquidos que se consumen diariamente consisten en bebidas con sabor o infusiones azucaradas.

“Por lo general, cuando los médicos o los nutricionistas hacen recomendaciones a los pacientes les dicen que coman menos. Pero no se hace hincapié en el consumo de bebidas que incluyen calorías. Lo ideal es que más gente consuma más agua por día o, en todo caso, bebidas con saber sin aporte de calorías”, explicó la nutricionista Verónica Chamorro, que fue una de las autoras del trabajo.

Al consumir bebidas o infusiones con azúcar, se ingieren calorías sin mayor contenido nutricional. La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda el consumo de azúcares simples, como los de las bebidas, no debe superar el 10 por ciento del total de calorías diarias. Pero en la Argentina esta sugerencia se pasa por alto.

El estudio reveló que sólo el azúcar en bebidas representa entre el 9 y el 15 por ciento del total, sin considerar los dulces, las mermeladas, las golosinas y otros alimentos que también contienen esos azúcares simples. En cambio, el agua pura (incluyendo a la red, mineralizada, potable envasada o mineral natural) tiene menos seguidores. Sólo el 21 por ciento de los líquidos que se ingieren corresponden a agua.

Cuando tiene sed, el cuerpo necesita agua. Sin embargo, el estudio reveló que el perfil del consumo se orienta a incorporar una gran cantidad de calorías “vacías” a través de té, café, mate, jugos, gaseosas y otras bebidas azucaradas. Hay una mayor preferencia por las infusiones, como mate, té y café primero: el 49% le pone azúcar.

Hubo pequeñas diferencias con respecto a las edades de los encuestados. En términos relativos, los niños y adolescentes se inclinan por lo azucarado. Los adolescentes son quienes proporcionalmente toman menos agua, y son los adultos y mayores de 45 años quienes se inclinan más por las bebidas con sabor sin azúcar.

En el caso de los que tienen entre 18 y 45 años, se encontró que ingieren 400 calorías extras a través de bebidas e infusiones. Esto significa que consumen en líquidos las calorías equivalentes a un plato de comida sin darse cuenta.

Para Esteban Carmuega, director del CESNI, este consumo oculto de calorías es un gran riesgo para la salud de la gente. “Con esta carga oculta de calorías, es muy fácil excederse de peso. Se puede producir un desbalance de energía, porque la persona consume más calorías de las que necesita diariamente para su nivel de actividad, y su organismo no es conciente. Esto es un camino de ida hacia el sobrepeso y la obesidad”.

Se sabe que un desbalance del 1 por ciento entre la ingesta y el gasto de calorías (es decir, se consumen más de lo que se gasta) puede representar en 10 años un aumento de 15 kilos de peso en los adultos.

Otro riesgo del consumo oculto de calorías es que se obliga al organismo a necesitar más insulina. “Esta exigencia puede conducir a mediano o largo plazo al síndrome metabólico y más tarde a la diabetes”, resaltó Carmuega.

El estudio reveló otros detalles de los hábitos argentinos. La proporción del consumo de agua pura y bebidas con sabor sin azúcar/calorías es significativamente mayor en las mujeres, en comparación con los hombres. Y que el 70% de las bebidas se consumen durante los almuerzos y las cenas.

A partir del relevamiento, que fue desarrollado con TNS Gallup y con apoyo financiero de una empresa multinacional que vende agua mineral y lácteos, los especialistas del Cesni dieron algunas recomendaciones para poner en práctica de manera individual o en las familias. “Por ejemplo, cuando se toma mate, té o café, se puede reemplazar el azúcar por edulcorante o directamente tomarlos amargos. Así, estaríamos evitando muchas calorías extras por día y educando a nuestras familias en hábitos más saludables”, comentó Chamorro.

Otra medida es que se facilite el acceso al agua durante las comidas. “Una medida práctica y fácil es servir agua durante el almuerzo o la cena”. Por el estudio se supo que el agua es uno de los líquidos que menos se ingiere durante las comidas.

“Sería importante que los profesionales de la salud trabajen más con las mujeres, porque son ellas las que más agua consumen y pueden ser también quienes alienten a los niños a realizar el reemplazo de los jugos y gaseosas con azúcar por el agua u otras bebidas sin azúcar.

El consumo de agua –también halló el estudio– es mayor a medida que sube el nivel educativo. Se lleva a cabo generalmente fuera de los momentos de comida, aunque allí se concentra el 70 por ciento del consumo total de líquidos.

Las calorías ocultas en las bebidas diarias son, según Carmuega, un factor importante en el gran problema de la obesidad. “Hoy la mitad de la población argentina tiene sobrepeso y obesidad, y el consumo de bebidas con calorías es un factor de esta epidemia. Necesitamos debatir abiertamente sobre la cantidad de calorías que se ingieren con las bebidas de manera inadvertida”, opinó el especialista.

Además, puntualizó que los niveles de consumo de azúcar en niños de hasta 5 años y en los adolescentes deben ser un llamado de atención para los padres. “Necesitamos que reemplacen las infusiones y bebidas con azúcar por agua y bebidas sin azúcar, especialmente durante las comidas principales –dijo Chamorro–. Esto debe hacerse acompañado de una alimentación saludable y con actividad física diaria”.

Fuente: clarin.com

El agua fría, uno de los mejores antiinflamatorios

El agua fría es un buen aliado del deportista ya que por sus propiedades antiinflamatorias nos va a ayudar a recuperar antes y mejor.

El agua fría provoca una vasoconstricción que ayuda a reducir el flujo de sangre y por tanto evita que después del deporte se produzca un exceso de inflamación y las molestias que ello conlleva.

Y cómo se produce esa inflamación al hacer deporte. Fácil, porque las fibras musculares cuando trabajan a un ritmo al que no estamos acostumbrado, levantando pesas por ejemplo o corriendo a un ritmo no habitual, se rompen en parte y eso genera una respuesta inflamatoria.

El hacer baños de contraste o duchas de agua fría tras una sesión intensa nos va a ayudar a que no haya tanto flujo de sangre en la zona y la respuesta inflamatoria sea menor, de ahí la importancia del frío, tanto en la recuperación como a la hora de sufrir y tratar ciertas lesiones.

Por ejemplo las agujetas no son más que una respuesta inflamatoria bastante fuerte que entre otras cosas nos ocasiona dolor. Si inmediatamente después de hacer una actividad muy intensa o incluso ya después de sufrir agujetas acudimos al agua fría nos puede ayudar a mitigar el dolor y a recuperarnos antes.

Fuente: vitonica.com

martes, 16 de noviembre de 2010

El agua, esencial para la vida

Respirar y beber son las dos necesidades más importantes del organismo humano.

El agua es esencial en nuestra vida ya que estamos formados por una parte muy importante de agua, 70%, y a pesar de ello nuestro cuerpo no dispone de reservas hídricas. En condiciones normales eliminamos unos 2,5 litros de agua por día, sobre todo la eliminamos por el riñón pero también se elimina por el intestino, los pulmones y la piel.

Debemos beber entre un litro y uno y medio litros de agua por día, además del agua que contienen los alimentos y la resultante al metabolizar los hidratos de carbono y las grasas, es decir que si eliminamos dos litros y medio debemos reponer dos litros y medio ya que si no nos estaremos deshidratando. Es necesario beber agua y no otras bebidas para hidratarnos ya que los refrescos o el alcohol no nos hidratan. La mayor parte de las hortalizas y frutas también contienen una cantidad importante (entre el 75 y 90%) de agua así como la leche y los huevos.

No reponer esa cantidad de agua puede provocar dolores de cabeza, estreñimiento, vómitos, mareos, fatiga física y mental con disminución del rendimiento, dificultad visual, pérdida de memoria, aumento del ritmo cardíaco, etc. La mayoría de nosotros no bebemos lo suficiente y creemos que solo debemos beber cuando tenemos sed, no es cierto, no debemos esperar a tener sed para beber, la sed es una señal tardía de alarma de una cierta deshidratación. No esperemos a tener sed.

El agua tiene cero calorías, por tanto ni engorda ni adelgaza, al contrario que el alcohol que con sus calorías nos engorda, igual que las bebidas carbonatadas o edulcoradas. Las pérdidas de agua se producen con el calor o debido a determinados problemas como alteraciones renales o intestinales. Agua que pierdes agua que debes reponer.

Si quieres saber si estas hidratado o no, observa el color de la orina, si es clara y diluida estás bien hidratado, si es oscura y densa indica que te falta agua. Disponer siempre de agua a mano y beber entre comidas es la manera de hidratarnos bien. No lo olvidemos, un litro y medio de agua por día, día tras día, ya que no se almacena, nos hará estar hidratados para la vida.

Fuente: vitonica.com

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Agua y salud

El agua es un alimento esencial para la vida: los alimentos y los gases se transportan en medio acuoso, los productos de desecho se expulsan del cuerpo mediante la orina y las heces, el agua regula nuestra temperatura, lubrica nuestras articulaciones y contribuye de forma decisiva a dar estructura y forma al cuerpo mediante la rigidez que proporciona a los tejidos, debido a que este preciado líquido no es comprimible.

Además, una correcta hidratación contribuye a mantener la piel tersa y joven, ya que la deshidratación aguda o crónica provoca que la piel se arrugue y resquebraje con facilidad.

Estudios preliminares indican que beber de 8 a 10 vasos de agua al dí­a podrí­an significativamente aliviar muchos malestares en el 80% de las personas, incluso disminuir el riesgo de cáncer de colon en un 45%, además de rebajar el riesgo de cáncer de mama en un 79% y reducir a la mitad de probabilidades de desarrollar cáncer de la vejiga.

El mecanismo de la sed es tan débil que con frecuencia el 37% de los seres humanos lo confunde con hambre. El agua puede ayudar a curar la acidez estomacal, dolores de espalda, migraña, asma, presión arterial y mejorar las condiciones de una diabetes. La depresión, la pérdida del líbido, el sí­ntoma de fatiga crónica, el lupus, la esclerosis múltiple, la distrofia muscular. Todas estas condiciones pueden ser causa de una deshidratción prolongada.

Pese a lo esencial que resulta, el cuerpo humano no tiene provisión para almacenar agua y cada día se pierden en torno a dos litros y medio por la orina (1500 ml), las heces (150 ml), el sudor (350 ml) y la respiración (400 ml). Por tanto, la cantidad de agua que se elimina cada 24 horas debe ser restituida para mantener el organismo bien hidratado.

Síntomas de la deshidratación

Sed, sequedad de las mucosas y de la piel, sensación de ardor y acidez gástrica, somnolencia, fatigabilidad extrema, y si es más grave, ojos hundidos, pulso acelerado, descenso de la tensión arterial, fiebre, retención de líquidos (por lo que algunos órganos, como los riñones, comienzan a fallar, pudiéndose llegar al colapso y la muerte) son algunos de los síntomas de la deshidratación.

El agua es vida, salud y belleza


Después del oxígeno, el agua es el componente natural más importante para el desarrollo y mantenimiento de la vida.

El agua ocupa las tres cuartas partes del mundo y en el cuerpo humano ocupa un importante porcentaje, ya que un hombre adulto sano representa alrededor del 60% de su peso corporal, menos que en el cuerpo de un recién nacido que ocupa el 80%.

La distribución del agua en el cuerpo humano es de aproximadamente 2/3 partes de líquido intracelular, de los cuales un 25% es líquido plasmático y 1/3 es líquido extracelular.

Para mantener un buen estado de salud el volumen de los líquidos del organismo en estos niveles deben permanecer constantes y para ello el cuerpo dispone de varios mecanismos para regular el agua total del cuerpo, como la sed, la hormona antidiurética (ADH) y los riñones.

El agua tiene muchas propiedades fisiológicas en el organismo, lo que hace que este vital líquido sea imprescindible para mantener la vida y la salud integral, entre las principales están:

- Participa en la mayoría de las reacciones químicas del metabolismo: como son los procesos de digestión, respiración, absorción y excreción.
- Ayuda a eliminiar toxinas del cuerpo.
- Es el medio ideal para transportar nutrimentos a todas las partes del cuerpo y recoger las sustancias de desecho de la actividad celular.
- Es un complemento de una dieta sana y equilibrada.
- Contribuye en el mantenimiento de la temperatura corporal del organismo, por medio de la generación de sudor lo mantiene fresco y libre de toxinas.
- Forma parte de los fluidos corporales, como la sangre, la saliva, líquido sinoval, las lágrimas, los mocos, etc.
- Aumenta el volumen del contenido intestinal y ayuda a su eliminación.
- Regula los niveles de acidez del organismo.
- Participa en la reparación y crecimiento celular del organismo.
- Da más vitalidad, elasticidas, suavidad a la piel e hidratación por dentro, lo que hace que uno se vea mucho mejor.

Es un excelente complemento alimenticio para la mujer embarazada, los niños recién nacidos, los enfermos. sobre todo aquella que no contiene calorías y es baja en sales.

domingo, 12 de septiembre de 2010

Cada gota de agua, cuenta

El agua dulce es un recurso escaso a nivel global. A su vez, la demanda de alimentos continuará creciendo. El desafío consiste y consistirá en producir más alimentos con los recursos disponibles, y hacerlo de manera sustentable; esquema al que obviamente no escapa el agua dulce. En este sentido, conocer la demanda de agua y su impacto sobre el ambiente pasa a ser un factor clave en la gestión ambiental. A otra escala, y complementario con el concepto anterior, un uso eficiente del agua a nivel empresa de producción agropecuaria implicará un mejor gestión ambiental, estabilidad productiva y resultados económicos más estables y sostenibles. En el marco del XVIII Congreso de Aapresid, destacados profesionales y productores abordaron la temática con un mensaje claro y contundente: Hay que maximizar la producción de granos y alimentos por cada milímetro de agua ofrecido por el ambiente; minimizando las pérdidas no productivas y no contaminando o degradando un recurso vital.

En la región, aledaña a Anguil (La Pampa), Alberto Quiroga (INTA) se esfuerza desde la investigación en encontrar diseños y esquemas productivos que permitan un uso eficiente del agua, apuntando a lograr la estabilidad de la empresa productiva. “Cuando se analiza la gestión del agua en un sistema de producción es conveniente considerar a la rotación de cultivos como una secuencia de usos y consumos de agua que se suceden en el tiempo en un mismo potrero”, disparó Quiroga. Además, resulta necesario considerar “cual es la probabilidad de que las precipitaciones cubran los requerimientos hídricos de cada cultivo integrante de la rotación”. En tercera instancia es necesario evaluar “si la diferencia entre las precipitaciones (oferta) y los requerimientos del cultivo (demanda) puede ser cubierta con el agua almacenada en el suelo en periodos previos a la siembra (barbecho)”. Para ello, un factor a no descuidar es el conocimiento del propio suelo, atendiendo a su capacidad de almacenamiento y a la facilidad o no a ceder el agua a los cultivos. Por ejemplo, en Anguil, y para el cultivo de trigo “los rendimientos correlacionan con el agua almacenada a la siembra y esta con la cantidad de residuos en superficie durante el barbecho”, enfatizó.

Desde el punto de vista práctico, Quiroga remarcó la importancia de lograr con las rotaciones de cultivos altos niveles de cobertura. Específicamente, “la contribución de la cobertura del suelo resulta clave, dado que tiende a optimizar la relación transpiración/evaporación incrementando la eficiencia de uso del agua”, agregó. Según el especialista del INTA “este efecto se lograría con coberturas superiores al 60%”.

En buena parte del norte del país, específicamente en Gancedo y La Paloma, las condiciones ambientales son muy distintas a las de La Pampa; sin embargo, la gestión del agua se torna igualmente un factor clave. “Desde el punto de vista productivo hay que recordar que la transpiración es la única vía de salida del agua del suelo hacia la atmósfera que está directamente ligado con la fotosíntesis y por consiguiente al crecimiento y rendimiento del cultivo”, enfatizó Rodolfo Gil, especialista de INTA Castelar. Por lo tanto, gran parte de la sustentabilidad del sistema de producción está relacionada “al efecto directo que el agua tiene sobre los rendimientos de los cultivos, y también a la producción de materiales orgánicos (rastrojos) que finalmente mejoran las características estructurales del suelo y su calidad de funcionamiento”, agregó.

Al respecto, “el uso eficiente del agua de los sistemas agrícolas en los ambientes del NEA debería contemplar la mejora en el almacenaje de agua, el uso por parte de la planta y la transformación en biomasa vegetal; procurando que la mayor parte de las precipitaciones sea incorporada y almacenada en el suelo, que la mayor parte de esa cantidad de agua que se logró almacenar sea utilizada en el proceso de transpiración del cultivo y finalmente, que la mayor parte de la transpiración del cultivo sea proporcionalmente convertida en biomasa vegetal y rendimiento”, enfatizó Gil.

En la práctica una de las estrategias tecnológicas “está orientada hacia el manejo del agua durante los períodos de barbecho, y hacia el control de pérdidas por escurrimiento y evaporación durante los meses estivales, de modo tal de incrementar la disponibilidad de agua para los cultivos de verano, a la vez de sostener el balance de carbono del suelo”, precisó. La experiencia acumulada por Gil en años de trabajo con productores muestra que “en los barbechos limpios el aprovechamiento de las lluvias ocurridas dentro de ese período (eficiencia de barbecho) no superan en promedio el 17%”. Además, en ninguno de los 4 años en estudio se consiguió almacenar más de un 40% de las lluvias totales y, en algunos años y condiciones, las pérdidas por evaporación y escurrimiento superaron a los ingresos del período, observándose eficiencias de almacenaje negativas hasta los 2 metros de profundidad.

Una de las alternativas tecnológicas para aumentar la eficiencia de uso del agua consiste en la implantación de cultivo de cobertura (CC), “a fin de aprovechar esa cantidad de agua que con el manejo habitual se perdería, y al mismo tiempo generar abundante cobertura para el cultivo siguiente a la vez de aumentar los aportes de biomasa al sistema”, aclaró. Específicamente, en Gancedo y La Paloma (Chaco) “en años de buenas precipitaciones, las lluvias alcanzan a recargar los perfiles y las diferencias respecto de los barbechos sin coberturas no son significativas. Sin embrago, en años de menores aportes de lluvia, los CC, sobre todo en aquellos que se demora la secada, los niveles de humedad final pueden resultar considerablemente menores, de hasta 100 mm de agua útil menos en el perfil”. En cambio, cuando los CC “son secados al 10% de floración los consumos resultan significativamente menores (20%), llegando con niveles de humedad final similares a los tratamientos de barbecho limpio”, enfatizó entusiasmado. Más hacia el este chaqueño el panorama es diferente, y la estrategia pasa por “implementar doble cultivos anuales, con predominancia de las opciones estivales”, aclaró (Ver Doble cultivo estival ).

En el sur bonaerense, y con otra realidad ambiental, los CC o los verdeos (en planteos mixtos) son una estrategia elegida por los productores de la Regional Tres Arroyos. “ El promedio de las lluvias zonales de los alrededores de partido de Tres Arroyos oscila los 7.000 a 900 milímetros por año”, describió Guillermo Paihle. Tradicionalmente, en la región la rotación predominante incluía un cultivo de fina, un largo barbecho y al año siguiente un cultivo de grueso (soja o sorgo). “En el grupo regional de Aapresid vimos como en esa secuencia queda agua que no se capta, ni aprovecha. En consecuencia, se han incorporado diferentes tecnologías para captar lluvias que no se pueden almacenar”, destacó Paihle.

Fuente: clarin.com

viernes, 27 de agosto de 2010

Agua seca contra el cambio climático


Una sustancia que se llama agua seca y parece azúcar impalpable pero no lo es, está formada por agua en un 95%.

Aunque fue patentada en 1968, es ahora cuando nuevos experimentos hacen vislumbrar su utilidad para absorber gases, incluidos los de efecto invernadero.

Los químicos que estudian sus posibles usos creen que podría ser la solución para absorber y almacenar el exceso de dióxido de carbono en la atmósfera. También es prometedora para iniciar de forma más eficiente las reacciones químicas utilizadas en la producción de centenares de productos de uso cotidiano y para transportar sustancias peligrosas, han explicado en la reunión anual de la Sociedad Americana de Química en Boston.

Cada partícula de agua seca contiene una gota de agua rodeada de nanopartículas hidrofóbicas de sílice (el óxido de silicio presente en la arena de la playa). Este recubrimiento impide que se recombinen las gotas para volver a ser un líquido. El resultado es un fino polvo que puede absorber gases que se combinan químicamente con el agua para fomar hidratos.

Aunque el agua seca fue desarrollada en 1968 y fue ensayada en cosméticos, entre otras áreas, hasta 2006 no se iniciaron, en Reino Unido, el estudio en profundidad de su estructura y los experimentos para posibles nuevas aplicaciones, informa la sociedad.

Una de las más recientemente experimentadas, con éxito, es para el almacenamiento de gases, en la Universidad de Liverpool bajo la dirección de Andrew Cooper. Un litro de gas metano se puede almacenar en unos seis gramos de polvo, a una temperatura no muy baja. Los investigadores piensan también en su utilidad para explotar depósitos de gas metano que estén dispersos o en forma de hidratos en el fondo del mar, aunque reconocen que todavía queda mucho trabajo de investigación por hacer y que el coste sería seguramente todavía un problema. Además, se profetizan aplicaciones más directas en los procesos químicos más comunes en la industria y para almacenar y transportar sustancias peligrosas en forma de emulsiones, que se transformarían en polvo.

Fuente: elpais.com

martes, 24 de agosto de 2010

Un ensayo clínico muestra que beber dos vasos de agua antes de comer sirve para perder peso


El elixir más barato y simple para perder peso es el agua, y funciona, ha comprobado el primer ensayo clínico realizado sobre esta hipótesis, tan extendida como poco demostrada. El agua se debe de tomar antes de las comidas y da igual que sea del grifo o mineral.

Que el agua puede ayudar a perder peso es un argumento utilizado hasta en la publicidad, pero demostrarlo es otro cantar. Por eso se ha hecho un ensayo clínico con todas las garantías, según sus autores, y se ha presentado en el congreso anual de la Sociedad Química Americana , en Boston (EE UU).

"Presentamos los resultados del primer ensayo de intervención controlado y aleatorio que demuestra que un mayor consumo de agua constituye una estrategia efectiva de pérdida de peso", dijo Brenda Davy, directora del estudio. "Anteriormente habíamos visto que las personas de mediana edad y los mayores que bebían dos vasos de agua justo antes de una comida consumían entre 75 y 90 menos calorías durante esa comida. En este último estudio hemos comprobado que, a lo largo de 12 semanas, los que hacían dieta y bebían agua antes de las comidas, tres veces al día, perdieron al menos 2 kilos más que los que no aumentaron su consumo de agua".

Según Davy, "la gente debería de beber más agua y menos bebidas azucaradas, ricas en calorías. Es una forma simple de facilitar el manejo del peso".

El estudio se hizo sobre 48 adultos de entre 55 y 75 años, divididos en dos grupos. Un grupo bebió dos vasos de agua de 230 mililitros antes de las comidas y el otro no. Todos los sujetos se sometieron a una dieta baja en calorías. Durante las 12 semanas siguientes, los bebedores de agua perdieron unos 7 kilos y los no bebedores unos 5 kilos.

La explicación más simple y más probable de esta diferencia es que el agua hace sentir el estómago más lleno, con lo que disminuye el apetito y se come menos. Si además se toma agua o refrescos con edulcorantes en vez de bebidas con alto contenido calórico, también se controla mejor el peso.

Los autores del estudio reconocen que nadie sabe exactamente cual es el consumo diario recomendable de agua. El Instituto de Medicina, un organismo de las Academias Nacionales de Estados Unidos, recomienda a las personas sanas que beban cuando tengan sed. En mujeres, el consumo recomendado es de unos 9 vasos diarios de líquido, incluida agua, mientras que los hombres deben de tomar unos 13 vasos. Y ojo, que es posible intoxicarse con agua, si se toma demasiado.

Fuente: elpais.com

jueves, 5 de agosto de 2010

Beber un vaso de agua en ayunas, la mejor manera de poner en marcha el metabolismo

A la hora de adelgazar solemos ponernos el mundo por montera y hacer muchas veces cosas que no tienen ninguna lógica ni sentido. Entorno a la pérdida de peso existen muchos mitos falsos que mucha gente se sigue creyendo a pies juntillas. En cambio otros no son al cien por cien mentira, sino que solo en parte. Nosotros nos vamos a detener en uno de ellos, y es el que dice que si bebemos un vaso de agua en ayunas adelgazaremos.

Todavía hay quienes piensan que por atiborrarse a agua nuestro cuerpo pierde gran parte de su grasa a través de la orina.

Este es un poco el principio de esta afirmación, y es que la gente que se toma un vaso de agua en ayunas piensa que con esto servirá para mantenerse en el peso ideal. Esto es totalmente falso, ya que el deporte y una alimentación correcta es la base para estar en forma y mantenernos en el peso ideal.

A pesar de todo esta creencia tiene algo de cierto.

Seguro que hemos oído hablar en más de una ocasión del metabolismo, que es uno de los responsables de que quememos más o menor cantidad de calorías, ya que cuanto más rápido funcione más calorías eliminaremos.

Por ello es esencial que mantengamos activo el metabolismo. Una buena forma de hacerlo es a través del ejercicio, que nos estimula para estar en constante actividad aún después de practicarlo. Pero a pesar de todo, la alimentación y los hábitos también tienen mucho que ver en esta activación.

Consumir un vaso de agua en ayunas es una buena manera de comenzar el día activando el metabolismo. Debemos tener presente que al pasar toda una noche sin probar bocado, nuestro cuerpo necesita que se active y una de las mejores maneras de hacerlo es con agua. Esto nos ayudará a despertar el metabolismo y prepararlo para el resto del día. Es importante que lo activemos cuanto antes para que empiece a quemar calorías, y por ello nada más levantarnos es una de las mejores opciones. Además, a esto debemos sumar la hidratación que este vaso de agua nos aportará.

A pesar de ser una buena manera de activar el metabolismo, nunca el agua en ayunas será una manera de eliminar grasas del cuerpo, sino que lo único que hace es hidratarnos y ayudarnos a depurar el organismo de toxinas y demás sustancias que lo perjudican.

Por ello no debemos perder esta costumbre nada más levantarnos y antes de desayunar, ya que no debemos olvidar el desayuno, pues es esencial cargas las pilas desde primera hora de la mañana.

Fuente: vitonica.com

viernes, 12 de marzo de 2010

Funciones del agua en el organismo


El agua es un recurso vital para el organismo, cumple funciones específicas por lo que recomiendan consumir al menos 2 litros diariamente.

  • Se dice que el agua es el “solvente universal” en ella son transformados la mayoría de los nutrientes y sustancias necesarias para el buen funcionamiento celular.
  • Es desintoxicante, los residuos generados durante el metabolismo de las proteínas, se disuelven en la sangre y son removidos antes de que se acumulen en concentraciones tóxicas. El trabajo de los riñones consiste en filtrar esos residuos de la sangre y excretarlos, mezclados con el agua formando la orina.
  • Es amortiguadora, básicamente de las articulaciones, ya que de hecho protege de traumatismos.
  • Lubricante, del aparato digestivo y de todos los tejidos que son protegidos por mucosas, evitando fricción entre ellos.
  • Termo reguladora: Regula la temperatura corporal mediante la transpiración, que se traduce en el refrigerante del cuerpo. La piel es el principal órgano mediante el cual se elimina el exceso de calor corporal. Además el agua es fundamental para mantener la piel saludable.
  • Provoca intercambio gaseoso en los alveolos pulmonares, sacando el aire pobre en el oxígeno resultante de las combustiones energéticas, junto con el vapor de agua.
  • Produce saciedad: Esto es especialmente importante para aquellas personas que se encuentran bajo un plan de adelgazamiento. Esta función se debe a que el líquido defiende las paredes gástricas además de combinarse con la fibra y brindar volumen retrasando el vaciado del estómago y contribuyendo a comer menos.
  • Es activadora del metabolismo: Beber líquido en abundancia favorece el aumento del gasto metabólico, es decir beber 2 litros de agua por día puede llegar a producir un incremento del gasto calórico de alrededor de 30 a 60 calorías.
  • Es diurética: Al beber agua en cantidades, los riñones funcionan mejor , evitando retención de líquidos.
  • Es laxante: Al formar parte de la materia fecal y aumentar su volumen, los movimientos intestinales se ven estimulados previniendo enfermedades como el estreñimiento, los divertículos y las hemorroides.
Fuente: saluddiaria.com

jueves, 8 de octubre de 2009

El porque del liquido

El líquido corporal en un adulto sano, representa entre un 60 y un 50 % del peso total. El líquido ingresa al organismo por dos fuentes principales, formando parte de los alimentos o como líquidos de bebida y en menor medida en el producido en procesos metabólicos de carbohidratos y grasas. Sus perdidas son a través de la orina de las heces o de la sudoración.

Cuando hablamos de líquidos de bebida recomendados en planes hipocalóricos nos referimos a agua, agua mineral con y sin gas, jugos y gaseosas Light, infusiones como café te mate te de hierbas, caldos acalóricos.

Son de fundamental importancia en los planes dietarios para bajar de peso, mas aun si las dietas utilizadas seleccionan los hidratos de carbono excluyendo aquellos provenientes de cereales y sus harinas, azucares refinados y almidón como el proveniente de tubérculos (papa batata etc.).

Una primera lectura diría que el líquido viene a "ocupar un espacio", "llena", y por lo tanto facilita el cumplimiento de un plan hipocalórico. En un punto esto es verdad ya que los líquidos, en especial los calientes, tienen un efecto sacietógeno, pero su efecto positivo excede ampliamente esta explicación, haciendo su consumo imprescindible en este tipo de tratamientos, veamos algunas de sus causas.

- Las dietas que no contienen cereales, ni harinas y azucares refinados, tiene un efecto diurético dada la capacidad de estas sustancias de retener líquidos. A su vez en los tratamientos para bajar de peso el volumen de alimentos es menor, ingresando de esta forma al cuerpo menos agua proveniente de los alimentos. Se suma entonces al requerimiento de líquidos básico una cantidad extra por la mayor perdida y otra por el menor ingreso.

- Este aumento de la diuresis podría provocar en algunos casos, por un efecto de barrido, un aumento en la pérdida de vitaminas y minerales aportados por la dieta, los líquidos de bebida entonces no solo reponen el líquido perdido en exceso, si no que también aportan electrolitos, minerales y en el caso de algunos especialmente fortificados también vitaminas.

- Es aporte de alimentos y bebidas son fundamentales para la vida, el cuerpo nos lo recuerda a través de la sed y el hambre, estos dos centros se encuentran muy cercanos en el cerebro. Ya sea por su proximidad o por el hecho de que la gran mayoría de los alimentos sólidos tienen un elevado porcentaje de liquidas en su composición, a la hora de pedir y entender lo que se requiere el cuerpo registra solo "necesidad", sin especificar "que" necesita. Si respondemos con alimentos vamos a saciar las dos necesidades, sólida y liquida, esto explicaría el porque muchas personas que consumen grandes volúmenes de alimento beben escasamente. Ahora bien, siguiendo esta misma línea de pensamiento, si tenemos la necesidad de líquido bien cubierta, si estamos bien hidratados esto nos permitiría entonces no confundir el hambre con la sed.

- En todo tratamiento serio de descenso de peso la actividad física ocupa un lugar de privilegio, requiriendo una frecuencia y una intensidad adaptada a la situación personal de cada individuo Es fundamental estar bien hidratado antes durante y después de realizar actividad física reponiendo así el líquido y las sales minerales que se pierden por transpiración.

Aunque hoy crea que "no puede" atrévase a intentarlo, comience el día con dos vasos de agua y continúe hidratándose de forma continua durante el resto de la jornada, recuerde que un cambio de hábito comienza con un primer paso.

Fuente: lanacion.com

miércoles, 9 de septiembre de 2009

Consejos y sugerencias para una correcta hidratacion


El agua
El agua cumple una función vital ya que permite que se realicen todos los procesos bioquímicos imprescindibles para el funcionamiento del organismo, posibilita el transporte de los nutrientes hasta las células, ayuda a la digestión al diluir los nutrientes de lo alimentos, contribuye a regular la temperatura del cuerpo mediante la evaporación por la piel (sudoración), etc.

Además, el intestino absorbe parte de estos líquidos, gracias a los cuales es posible eliminar todo lo que el cuerpo no necesita, a través de las secreciones y de la orina, por lo que también previene el estreñimiento.

La deshidratación
¿Sabías que una persona puede sobrevivir tres semanas sin alimentos pero sólo tres días sin ingerir líquidos?

Teniendo en cuenta la importancia que tiene la hidratación para la salud, el nivel de líquidos debe mantenerse constante para que no suframos deshidratación, es decir, una disminución de la cantidad de líquido existente en nuestro organismo que provoca falta de agua en el interior de las células.

La deshidratación se produce cuando la cantidad de líquidos ingeridos es menor que la cantidad que se elimina, como consecuencia de las distintas funciones orgánicas.

Y es que, como consecuencia de los distintos procesos vitales, el organismo sufre continuas pérdidas de líquidos, a través de la piel por la sudoración, de la orina, de los pulmones cuando respiramos, etc. Por ello, el balance hídrico debe estar equilibrado, es decir, la cantidad de líquido que entra en el cuerpo debe ser la misma cantidad que se elimina.

Consejos generales para una óptima hidratación

* Tomá líquidos antes de tener sed.
* Mantené el equilibrio entre el líquido que entra y el que sale del cuerpo. Lo recomendable es ingerir entre 2 y 3 litros de líquidos diariamente.
* Vigilá la hidratación de niños, adolescentes, embarazadas y personas mayores.
* Antes, durante y después de realizar ejercicio físico, ingiere líquido.
* El trabajo, el estrés o estar en sitios con aire acondicionado o calefacción también hace que se pierdan líquidos.
* Evitá el alcohol, su ingestión deshidrata.
* Con el calor, más líquidos.
* Para una mejor y más fácil hidratación, ingerí variedad de alimentos y bebidas.
* Informate para prevenir las consecuencias de la deshidratación.

Consejos de hidratación para niños que realizan deportes

Los niños pueden manterner una hidratación normal durante el ejercicio si se tienen en cuenta las siguientes recomendaciones:

1. Diariamente se deben consumir 3-4 litros de líquidos, entre agua, bebidas hidratantes y jugos de fruta.
2. Una a 2 horas antes de iniciar el ejercicio o entrenamiento se deben tomar 1-2 vasos de líquido y nuevamente 10-15 minutos antes, (agua, bebida hidratante o jugos de fruta naturales).
3. Durante el entrenamiento se debe beber 100-200 cc, en pequeños sorbos, cada 20 minutos, según las necesidades individuales y el entrenamiento lo permita.
4. Después del entrenamiento se deben consumir líquidos a libre demanda, hasta la saciedad. (2 vasos por cada libra de peso perdido) Para promover un mayor consumo de líquidos es aconsejable suministrar además del agua pura, bebidas hidratantes o jugos de fruta naturales, de sabores agradables y que llamen la atención.
5. Los líquidos deben estar ligeramente fríos (8-12 grados centígrados).
6. Se debe enseñar al niño a registrar su peso en una planilla antes y después de su entrenamiento para conocer la pérdida de líquido durante la práctica y así indicarle cuánto líquido debe consumir como mínimo lo antes posible.
7. Se deben evitar las bebidas con alto contenido de azúcares por que pueden producir trastornos gastrointestinales, (gaseosas, néctares, frescos, bebidas achocolatadas, etc.)
8. Si al terminar el entrenamiento o varias horas después, el niño continúa con sed, siente dolor de cabeza, observa sus labios resecos o siente fatiga, significa que aún continúa deshidratado y debe consumir lo más pronto posible, mayor cantidad de líquidos.

domingo, 23 de agosto de 2009

El boom del agua embotellada llego a su fin


MIAMI.- Tal vez sea la recesión, una mayor conciencia ambiental o una combinación de ambas, pero el hecho es que, por primera vez en una década, las ventas de agua embotellada en los Estados Unidos han registrado un bajón.

Lo que muchos consideraron el mayor golpe comercial desde que DeBeers inventó el mercado de los diamantes proclamando que eran "el mejor amigo de la mujer", el agua embotellada pasó de ser una curiosidad en la década del 70, a una moda en los 80, a una forma de consumo obligatorio a partir de los 90.

La imagen de una esbelta veinteañera, vestida con ropa deportiva y acarreando su infaltable botella de agua, bien podría ser el póster cultural de finales del siglo XX.

Entre 1990 y 1997, las ventas de agua embotellada en los Estados Unidos pasaron de 115 millones a 4000 millones de dólares. Entre 1997 y 2006, aumentaron el 170%, hasta totalizar 10.800 millones de dólares. Pero el año pasado, lo norteamericanos consumieron 400 millones de litros menos que el año anterior, de 110 litros per cápita en 2007, a 107 en 2008, según la revista Beverage World .

Hasta el severo Wall Street Journal se preguntaba la semana pasada si no estaríamos presenciando el principio del fin del boom del agua embotellada. Argumentó que Nestlé S.A., el mayor grupo en ventas de alimentos y bebidas del mundo, había registrado una caída del 3% en las ganancias de la primera mitad del año, y que el segmento más débil de su operación era la división de agua embotellada, responsable del 10% del total de las ventas de la compañía. Nestlé comercializa una docena de marcas de agua embotellada, incluidas Perrier, San Pellegrino, Poland Spring y Zephyrhills.

Un litro de agua embotellada en un supermercado cuesta un promedio de 70 centavos en los Estados Unidos. En un restaurante puede costar entre 4 y 8 dólares. Esto es más que el precio de la nafta, que en estos días anda en alrededor de 65 centavos el litro.

De modo que, probablemente, el principal factor en la caída de las ventas sea el económico. Muchas empresas que antes ofrecían agua embotellada gratuitamente a su personal dejaron de hacerlo, como una forma de reducir sus gastos, mientras que el consumidor individual, que antes cargaba mecánicamente su docena de botellas en el carrito, ahora lo piensa dos veces.

Ni más limpia ni más sana

El fenómeno está acompañado de estudios que demuestran que al agua embotellada que se vende en los Estados Unidos no es necesariamente ni más limpia ni más sana que la que proviene de las canillas, sino que, en varios casos, hasta es significativamente inferior.

Según una investigación de cuatro años realizada por el Consejo de Defensa de Recursos Naturales (NRDC), una de las más respetadas organizaciones ambientalistas del país, que incluyó el análisis de más de 1000 botellas de agua de 103 diferentes marcas, reveló que un tercio de ellas contenían diversos niveles de contaminación, incluso químicos orgánicos sintéticos, bacterias y arsénico.

El otro problema son las botellas. La mayor parte de los envases son de tereftalato de polietileno, un producto hecho a base de petróleo crudo. Según un estudio realizado por la Universidad de Louisville, se requieren 17 millones de barriles de petróleo para producir las 30.000 millones de botellas que se venden anualmente en los Estados Unidos.

Más grave aún, el 86% de estos envases no son reciclados, lo que significa que tomará entre 400 y 1000 años degradarlas, según el Instituto de Reciclaje de Envases (CRI).

Esto ha llevado a muchos restaurantes y hoteles en las principales ciudades del país a dejar de ofrecer agua embotellada, citando sus preocupaciones ambientalistas, pero igualmente preocupados por el costo que implica la operación de descarte y reciclado de los envases. Prefieren instalar sistemas de filtrado y ofrecer el agua en bidones.

Si el negocio del agua embotellada efectivamente declina, tal vez el próximo gran boom sea el aire envasado. Podría empezar en las líneas aéreas, empeñadas en vender todo cuanto sea posible, y luego extenderse a las grandes ciudades.

Con el nivel de contaminación ambiental en ascenso, nadie debería sorprenderse.

lanacion.com

lunes, 6 de abril de 2009

El 43% desconoce que la sed es síntoma de deshidratación

Es lo que revela una encuesta hecha en Capital y GBA
El 43% de los adultos desconoce que la sed es un síntoma tardío de deshidratación, según revela una encuesta realizada por TNS Gallup a pedido de Coca-Cola sobre 520 personas de la ciudad de Buenos Aires y del Gran Buenos Aires.

Además, el estudio halló que sólo el 60% conoce cuál es la ingesta diaria de líquido recomendada (entre dos y tres litros), aún cuando el 80% de los encuestados dijo que la hidratación es muy importante para la salud, lo que revela una brecha importante entre lo que gente dice y lo que realmente hace.

Más de la mitad de los encuestados (55%) mencionó el deporte como otro de los momentos clave a la hora de ingerir líquidos. Para el 45% de los encuestados es importante hidratarse después de realizar alguna actividad física; para el 27%, durante; y sólo para el 25% es necesario hacerlo antes.

Sin embargo, solamente 3 de cada 10 personas dice realizar algún tipo de actividad física de forma regular.

Cascada Inacayal - Villa La Angostura - Patagonia Argentina