Una desadaptación genética, ¿la causa de la epidemia de obesidad?

La OMS reveló que, al año, mueren en el mundo tres millones de personas a causa de la obesidad. Una especialista consideró que “el ser humano está muy bien preparado genéticamente para defenderse del hambre pero no del exceso de comida”

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), en las últimas tres décadas las tasas de obesidad global se duplicaron y hoy en día viven en el mundo más de 500 millones de personas obesas.

La contundente cifra proporcionada por la Organización Mundial de la Salud revela que la epidemia de obesidad está lejos de ser controlada.

Especialistas que participaron de #JuntaMédica hablaron de un “ambiente obesogénico” para describir el cuadro de situación actual: la disponibilidad de alimentos y calorías es cada vez mayor.

Fabiana Stolman es médica especialista en nutrición con orientación en obesidad y clínica médica y miembro del equipo de Cirugía Bariátrica del Hospital Privado de Córdoba, en la Argentina. Y consideró que hoy en día, además, hay un “desacoplamiento entre costo y calorías (los alimentos más grasos son los más económicos de adquirir)”.

Tras asegurar que para que se produzca un cambio en la genética de una especia son necesarios miles de años, Stolman explicó: “Conservamos una genética preparada para otro nivel de gasto energético y otro tipo de alimentación y los cambios que se produjeron en el ambiente fueron mucho más rápidos que los que necesitaríamos para adaptarnos a este ambiente”.

Y prosiguió: “El ser humano está muy bien preparado para defenderse del hambre pero no del exceso de comida”. Esto es porque tenemos mecanismos hormonales y genéticos que nos preparan para atesorar en exceso energía y guardarla para épocas en que no haya.

“Nos encontramos en una época en que la disponibilidad es permanente y tendemos a atesorar”, sintetizó.

Por su parte, Ramiro González es licenciado en Ciencias de la Actividad Física y profesor de Educación Física de la Universidad Mayor, en Chile y destacó que “es importante poder complementar una buena alimentación con un tipo de actividad física adecuado a cada persona“.

“Es fundamental que podamos evaluar la realidad de cada persona y luego de eso generar un plan de trabajo adecuado. Es primordial combatir los malos hábitos de vida en cuanto a alimentación y sedentarismo, por eso es que nutrición y actividad física van de la mano”.

Fuente: saludable.infobae.com