La industria madre de San Juan, la vitivinicultura, acusa un serio
déficit de profesionales del vino: En 19 años sólo se recibieron 10
licenciados en Enología en la Universidad Católica de Cuyo (UCC);
mientras que en el terciario, el Instituto Superior en Enología e
Industrias Frutihortícolas, ingresan 35 alumnos por año pero sólo unos 5
se reciben. Son los dos únicos lugares para estudiar la carrera en la
provincia.
A esta realidad hay que sumarle que los enólogos de varias de las principales bodegas de la provincia son mendocinos: Pedro Pellegrina, de Casa Montes; Gerardo Danitz, de Graffigna; José Morales, de Callia; Eduardo Casademont, de Finca Las Moras; Oscar Biondolillo, ahora con su propia bodega Aguma; Marcelo Onofri, de Merced del Estero, entre otros.
Desde la UCC aseguraron que cuando las bodegas modernas comenzaron a elaborar varietales en la década del 90, junto con las primeras producciones de la reconversión traída por los diferimientos agrícolas, no había enólogos capacitados para esos vinos; era una "industria nueva" para una provincia que había sido la gran proveedora de vinos comunes.
Pero el avance de San Juan en la elaboración de vinos de calidad, ya probado con muchos premios internacionales ganados, no incentivó al estudio de la carrera por parte de los jóvenes sanjuaninos. "Siendo San Juan una provincia vitivinícola, creo que los chicos no conocen la necesidad del medio y sería importante que las cámaras del sector dieran a conocerla, eso es fundamental porque si no los jóvenes no ven esa necesidad", explicó Gloria Tropea, responsable de la carrera en la UCC.
En la Católica se dicta la Licenciatura en Enología desde 1994, y desde entonces los egresados "no llegan a 10", en promedio es un egresado cada dos años. "Por año se inscriben uno o dos alumnos, a veces se inician en Enología y se pasan luego a Alimentos", contó Tropea.
Parece lógico, la Licenciatura en Alimentos tiene un campo laboral muy amplio, "pero en San Juan la industria enológica es muy importante, los avances tecnológicos requieren recursos humanos muy preparados y en esos casos el título del terciario no alcanza. Por eso las bodegas importantes de San Juan tienen egresados de Mendoza", dijo.
El último Licenciado en Enología de la UCC egresó en el 2011 y es poco probable que este año egrese alguno.
Para Carlos Ojeda, profesor del terciario de donde los chicos egresan con el título de Técnico Viticultor Enólogo, es razonable que las grandes bodegas traigan enólogos de Mendoza. "Eso te demuestra que si bien los chicos salen con conocimiento, les falta mucho. No puede ser que un alumno en toda la carrera haga tres veces el análisis de alcohol", dijo.
El drama del terciario
En el patio lateral del terciario, ubicado en el predio de la Escuela de Enología, sigue tirado el inodoro que cambiaron hace una semana, del único baño que comparten chicos y chicas. El revoque caído deja ver la antigua construcción de adobe, en la parte más vieja de la escuela que hoy usa el terciario.
Hasta el 96 los enólogos se recibían en el secundario, ese título es el que tiene el 80% de los enólogos sanjuaninos. Pero para jerarquizar la profesión, crearon el terciario que a partir del 99 quedó separado de la Escuela de Enología. Desde entonces, y por diferencias entre las autoridades de la escuela y el terciario, los alumnos de éste último no podían usar las instalaciones del secundario.
Ojeda, que desde hace más de 10 años enseña en la institución, contó que antes los dejaban hacer prácticas en bodegas, pero ahora no. Las nuevas autoridades trasladaron el dictado de clases teóricas a la escuela Fontana y en el predio de Enología quedaron las "prácticas".
"Este es el laboratorio, esa batería es mía, la usamos porque no hay para hacer alcoholes, últimamente se ha equipado la parte de la tecnicatura olivícola. La carrera de Enología, la madre de nuestra industria, se estudia en estos tres salones inmundos", dijo Ojeda.
Estas carencias son en parte responsables de la alta deserción en el terciario. "La cantidad de profesionales que el instituto saca al medio es suficiente, pero hay que profesionalizarla mucho más, el Gobierno y la gente no sabe que la escuela vieja de Enología ya no genera enólogos, sólo éste Instituto y la Católica sacan enólogos", aseguró el profesor.
Fuente: http://www.tiempodesanjuan.com/notas/2013/7/7/deficit-enologos-tierra-buen-vino-35585.asp
A esta realidad hay que sumarle que los enólogos de varias de las principales bodegas de la provincia son mendocinos: Pedro Pellegrina, de Casa Montes; Gerardo Danitz, de Graffigna; José Morales, de Callia; Eduardo Casademont, de Finca Las Moras; Oscar Biondolillo, ahora con su propia bodega Aguma; Marcelo Onofri, de Merced del Estero, entre otros.
Desde la UCC aseguraron que cuando las bodegas modernas comenzaron a elaborar varietales en la década del 90, junto con las primeras producciones de la reconversión traída por los diferimientos agrícolas, no había enólogos capacitados para esos vinos; era una "industria nueva" para una provincia que había sido la gran proveedora de vinos comunes.
Pero el avance de San Juan en la elaboración de vinos de calidad, ya probado con muchos premios internacionales ganados, no incentivó al estudio de la carrera por parte de los jóvenes sanjuaninos. "Siendo San Juan una provincia vitivinícola, creo que los chicos no conocen la necesidad del medio y sería importante que las cámaras del sector dieran a conocerla, eso es fundamental porque si no los jóvenes no ven esa necesidad", explicó Gloria Tropea, responsable de la carrera en la UCC.
En la Católica se dicta la Licenciatura en Enología desde 1994, y desde entonces los egresados "no llegan a 10", en promedio es un egresado cada dos años. "Por año se inscriben uno o dos alumnos, a veces se inician en Enología y se pasan luego a Alimentos", contó Tropea.
Parece lógico, la Licenciatura en Alimentos tiene un campo laboral muy amplio, "pero en San Juan la industria enológica es muy importante, los avances tecnológicos requieren recursos humanos muy preparados y en esos casos el título del terciario no alcanza. Por eso las bodegas importantes de San Juan tienen egresados de Mendoza", dijo.
El último Licenciado en Enología de la UCC egresó en el 2011 y es poco probable que este año egrese alguno.
Para Carlos Ojeda, profesor del terciario de donde los chicos egresan con el título de Técnico Viticultor Enólogo, es razonable que las grandes bodegas traigan enólogos de Mendoza. "Eso te demuestra que si bien los chicos salen con conocimiento, les falta mucho. No puede ser que un alumno en toda la carrera haga tres veces el análisis de alcohol", dijo.
El drama del terciario
En el patio lateral del terciario, ubicado en el predio de la Escuela de Enología, sigue tirado el inodoro que cambiaron hace una semana, del único baño que comparten chicos y chicas. El revoque caído deja ver la antigua construcción de adobe, en la parte más vieja de la escuela que hoy usa el terciario.
Hasta el 96 los enólogos se recibían en el secundario, ese título es el que tiene el 80% de los enólogos sanjuaninos. Pero para jerarquizar la profesión, crearon el terciario que a partir del 99 quedó separado de la Escuela de Enología. Desde entonces, y por diferencias entre las autoridades de la escuela y el terciario, los alumnos de éste último no podían usar las instalaciones del secundario.
Ojeda, que desde hace más de 10 años enseña en la institución, contó que antes los dejaban hacer prácticas en bodegas, pero ahora no. Las nuevas autoridades trasladaron el dictado de clases teóricas a la escuela Fontana y en el predio de Enología quedaron las "prácticas".
"Este es el laboratorio, esa batería es mía, la usamos porque no hay para hacer alcoholes, últimamente se ha equipado la parte de la tecnicatura olivícola. La carrera de Enología, la madre de nuestra industria, se estudia en estos tres salones inmundos", dijo Ojeda.
Estas carencias son en parte responsables de la alta deserción en el terciario. "La cantidad de profesionales que el instituto saca al medio es suficiente, pero hay que profesionalizarla mucho más, el Gobierno y la gente no sabe que la escuela vieja de Enología ya no genera enólogos, sólo éste Instituto y la Católica sacan enólogos", aseguró el profesor.
Fuente: http://www.tiempodesanjuan.com/notas/2013/7/7/deficit-enologos-tierra-buen-vino-35585.asp
Fuente: Area del Vino
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