lunes, 15 de julio de 2013

Realidad de los insumos: Aumentos y escasez jaquean los pedidos

Las restricciones a la importación implementadas el año pasado, sumado a un aumento de los precios de los mismos, complica aún más la realidad que está atravesando la industria del vino. Papel y barricas se quedan en la aduana, mientras que el precio del vidrio y el corcho, continúan creciendo.

La industria vitivinícola argentina está pasando por diversos factores nacionales e internacionales que jaquean su realidad. Uno de los temas que se encuentran permanentemente en debate es los incrementos sostenidos de estos productos de primera necesidad. Y por el otro la imposibilidad de conseguir ciertos insumos importados de calidad debido a la implementación de las Declaraciones Anticipadas Juradas de Importación (DJAI), establecidas por la Resolución General 3255 de AFIP, a comienzos del año pasado. Y por el otro lado, encontramos los incrementos sostenidos de estos productos de primera necesidad.

Ante esta situación, Laura Santi, responsable de Producción de Dominio del Plata comentó que en general los insumos están sufriendo demoras. En algunos casos más que otros. Uno de ellos son las etiquetas, que según arroyó Santi las imprentas están sufriendo demoras (mínimas de 30 días) en los las entregas e incluso en repeticiones de producto. "Los argumentos que plantean es que no hay papel, que están teniendo problemas para recepcionar papeles especiales. Otro de los problemas que hemos notado es que cuando deben reponer un herramental que viene desde afuera (ej. Un cilindro de gofrado para hacer relieve) no pueden ingresarlos o el ingreso se demora muchísimo demorando las entregas.

En base a esta situación la responsable de Producción de la bodega contó que "la alternativa que han buscado fue generar o pensar nuevos desarrollos de etiquetas o de actualizar otras debido a las limitaciones de papeles/folias de stamping/etc. para así no sufrir demoras en los pedidos por este insumo".

Esta historia se repite para la bodega Renacer. Su director, Patricio Reich remarcó que esta problemática se debe principalmente a problemas de importación. "Por lo que me han comentado imprentas y gente del sector papelero, existía una empresa en Buenos Aires que proveía de una importante cantidad de papel a las imprentas argentinas. Esa empresa, por dificultades financieras y decisiones estratégicas, se traslado a Brasil. Por ende, hoy hay que importar el papel solicitando una DJAI: las demoras en las aprobaciones más las trabas hacen que exista faltante de este producto critico".

Para dar un ejemplo concreto, Reich comentó que ellos colocaron una orden de compra tanto de cajas como de etiquetas el 15 de mayo y aún estamos esperando que nos lleguen, solo recibimos entregas parciales. Lo que antes demoraba tan solo 15 a 20 días entre la orden de compra y la entrega del producto, en algunos casos ahora demora más de 45 días. En estas condiciones es difícil planificar comercial y financieramente una empresa.

La empresa de capitales chilenos, indicó que ellos tienen órdenes de compra acumuladas equivalentes a 2.5 meses de ventas que no han podido exportar, ya que no tienen las etiquetas y/o las cajas. "Los importadores llaman diariamente para saber el estado de la orden, y lamentablemente no tenemos respuestas concretas. Como estrategia, hemos optado por asumir el costo financiero y estoquearnos con insumos críticos: cajas, tapones, etiquetas, capsulas y botellas. Compramos el stock equivalente a 10 meses de ventas, cuando antes sólo comprábamos stock para tres meses", sostuvo Reich.

Más allá de este insumo, se suman las cajas, que según Santi tienen el mismo inconveniente de faltantes de papel y que también se les suman las huelgas gremiales). "Los plazos normales eran alrededor de 15 días, los actuales son unos 23 días aproximadamente".

En otro orden, José Spisso, Jefe de Enólogos Bodega O.Fournier indicó las grandes demoras se dan también en corchos y cápsulas. Al igual que Reich, Spisso menciona atrasos cercanos a los 40 días mínimos.
Por otro lado, en el caso de las barricas el problema parece ser aún más serio. Ya que según indica el jefe de Enólogos de O.Fournier, las demoras es lo que menos preocupa, ya que en el caso de este insumo, la realidad parece ser más grave, ya que habla de que directamente no ingresan.

En el caso de las barricas, Spisso comentó que "es una lotería que te las dejen ingresar, algunas empresas son autorizadas y otras están a la espera y no saben cuánto tiempo y tampoco el por qué no se los autorizan".

En relación a este punto, Leonardo Guevara, gerente de Operaciones de Alto Las Hormigas manifestó que este año sufrieron algunos retrasos en la entrega de barricas, las cuales fueron importadas desde Francia en un tiempo superior al normal, no tuvimos sin embargo retrasos en la importación de foudres y maquinarias de vendimia que llegaron procedentes de Francia e Italia en los tiempos previstos.

"Sin embargo -continuó el directivo- las declaraciones juradas previas a la importación representan una barrera burocrática que muchas veces complica la llegada a tiempo de este tipo de equipamientos, ya que por más que uno prevea un mayor lead time, no puede predecirse con exactitud en qué momento una DJAI va a ser aprobada".

Ante esto, es que Santi señaló que "una de las principales preocupaciones que tenemos hoy,  es no poder cumplir nuestros compromisos  con los mercados. Esta falta de disponibilidad o enlentecimiento del aprovisionamiento, hace que debamos en un contexto incierto, estoquearnos para no tener quiebres de stock y poder abastecer a nuestros clientes de manera correcta. Es también consecuencia que cada día somos menos competitivos,  ya que debido a las fluctuaciones de precios en insumos, las empresas tenemos cada día menos margen ya que es imposible trasladarlos al mercado en la mayoría de los casos".

Finalmente, en el caso de insumos secos, desde Alto Las Hormigas, comentaron que han tenido algunos retrasos sensibles en el aprovisionamiento de tapones técnicos por estiramiento del lead time de entrega normal a último momento. "La clave es trabajar en equipo y asociados con los proveedores, de manera planificada, ordenada y conociendo los lead times reales de abastecimiento. Esto permite operar conforme a ellos. Ganamos así en previsibilidad, lo que permite a su vez minimizar los riesgos efecto de la actual coyuntura", acentuó.

¡AUMENTOS!

Los insumos en general han incrementado sus precios entre un 20% y un 30%. Los que más se han visto afectados han sido las botellas, las cápsulas de estaño y el ácido tartárico y metatartárico.

Por su parte, Matías Bauzá, Senior Brand & P.R. Manager de Bodegas Salentein, remarcó que los que más han aumentado han sido consecutivamente las etiquetas, las barricas, los tapones (por aumento de arancel), las cajas y otros como el nitrógeno han aumentado mucho el precio. Entre estos, los tapones técnico lo han hecho entre 23% y 28%, entre junio 2012-junio 2013, mientras que los tapones naturales un 18%, y el nitrógeno un 22%.

Asimismo, Leonardo Guevara, director de Operaciones de Alto Las Hormigas señaló que "indudablemente se están produciendo aumentos en todos los insumos secos nacionales, importados, materiales diversos y servicios. En el caso de insumos secos producidos en el país y según el tipo de insumo, el incremento anual fluctúa entre el 17% y 25% aproximadamente. Lógicamente la variabilidad de insumos es alta y no todos tienen el mismo impacto en el costo final".

En cuanto a otro tipo de insumos, agregó que en el caso de los enológicos por ejemplo, han visto aumentos de hasta el 50% en algunos casos en el último año. "También vale aclarar que  existen insumos secos importados (que cotizan en dólares o euros), que han tenido incrementos en sus monedas de origen". 

Principales preocupaciones para palear la realidad

Cada día se acumulan más problemáticas al sector, que hacen dudar sobre la continuación de la industria.

Además de los insumos, tema que hemos desarrollado, los directivos de las bodegas manifiestan diversos puntos. Desde Renacer, su director contó que por un lado y como es sabido, la nafta desde abril de este año ha subido un 15%, afectando a una gran cantidad de nuestros proveedores, encareciendo su producción y trasladando estos aumentos a sus clientes. En esta línea, transportar mercadería es cada vez  más caro, los fletes se han encarecido enormemente. Reich, indicó que "tenemos muchos extra costos aduaneros a su vez que se escapan de nuestras gestiones y seguimos con problemas en recuperar el IVA de exportación y los reintegros. Renacer, al ser netamente un exportador, opto hace varios años como estrategia el importar en forma temporal algunos insumos, principalmente botellas. Hoy la logística (fletes, seguros, gastos despachante, gastos varios aduaneros) esta tan elevada, que es más barato comprar en Argentina incluyendo el IVA, que comprar en el extranjero en forma temporal (sin IVA y sin derechos de importación)".

Algo en particular que le sucede a Renacer y que observan con gran preocupación, es que a pesar de que exportan más de lo que importan y que cumplen con los requisitos de la Secretaría de Comercio para poder importar, se les ha denegado la posibilidad de importar su Sauvignon Blanc chileno, "el cual tendremos que descontinuar".

Por otro lado, Bauzá remarcó que las preocupaciones pasan por los costos crecientes acorde a la inflación (mano de obra; insumos  y materiales); la logística por costos crecientes de transporte, paros no programados (por huelgas) y gran cantidad de feriados y falta de repuestos.

Por su parte, Guevara indicó que en el mercado doméstico la falta de financiamiento considera que es uno de los principales inconvenientes a lo largo de toda la cadena de valor de la industria. "Productores de uva, proveedores de insumos, bodegas, distribuidores nacionales y minoristas, todos tratan de financiarse con quien tienen aguas arriba en esta cadena. El problema es que si no acordamos entre todos, el hilo se corta por lo más delgado", indicó.

Asimismo, tema mencionado en varias ocasiones los no reintegros de los derechos de exportación y la no compensación del IVA a quienes generan mucho valor agregado regional, con mano de obra local y que exportan la mayor parte de su producción sigue siendo un gran problema que atenta contra la estabilidad financiera de las empresas. 

Con respecto a esto, Guevara remarcó que el Estado Nacional aún no divisa esta problemática real de las economías regionales.

En relación a los mercados externos puntualizó: "me preocupa la pérdida de competitividad que está registrando nuestra industria en general. Las exportaciones argentinas están cayendo, mientras que países que compiten con Argentina por ganar un espacio en las góndolas de los principales países consumidores crecen con políticas económicas de largo plazo, acceso a los mercados financieros y estabilidad monetaria, cambiaria y marcos legales consistentes en el tiempo".

Fuente: Area del Vino

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