En el experimento se servía el mismo chocolate caliente presentado
en tazas de diferentes colores. Los voluntarios refirieron que el
chocolate servido en la taza de cierto color era ligeramente más dulce y
aromático que el resto, cuando realmente eran todos el mismo. Por lo
tanto, parece que el color de la taza influye en cómo el organismo percibe el sabor de la bebida.
El experimento no pretende ir mucho más allá, y no da para mucho
más. Podéis consultar algunos datos más sobre este experimento en MedlinePlus, aunque la idea con la que quiero que nos quedemos es que la presentación de los alimentos es importante a la hora de tomarlos.
Esto tiene su efecto positivo y negativo. Positivo en el sentido de
que puede convertir una comida en un manjar apetitoso, o negativo,
porque una presentación pobre de un plato que no nos guste hará que
pasemos directamente al postre. Por lo tanto, es muy útil tener en cuenta la presentación, por ejemplo, a la hora de tratar de comer más sano, o hacer que los niños coman frutas y verduras, u otros alimentos que no les suelen agradar.
Presentar los platos de forma ordenada, o divertida, puede ayudar a
que una comida no muy apetitosa se convierta en un manjar. A los
pequeños les gusta comer alimentos con formas y colores divertidos, y es
una buena fórmula para que coman zanahoria, calabaza, remolacha u otras
verduras con colores llamativos. En los adultos la idea es la misma:
una comida sana puede parecer poco apetitosa si no se adorna bien,
mientras que, usando la imaginación, seguro que salen platos llamativos para el estómago, y también para la mente.
En Vitónica tenéis gran cantidad de recetas saludables que, si se elaboran y presentan con un poco de imaginación, ganan por goleada a cualquier plato menos saludable.
Imagen | I love egg
Fuente: vitonica.com
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