jueves, 22 de diciembre de 2011

Melipal y un desafío

Con ocho añadas en su haber, Melipal, la joven bodega mendocina, se está preparando para elevar su marca a otro nivel.

En efecto, tras haber logrado excelentes puntajes en los últimos años y ser elogiada por la prensa internacional -como sucedió con el Melipal Malbec o con su Malbec Rosé-, la estrategia de sus propietarios hoy es consolidar la marca y que ésta sea un fiel reflejo de la "mística" de Agrelo.

Tras la exitosa experiencia que tuvieron de la mano de la "dupla estrella" conformada por Alberto Antonini y Héctor Durigutti, Melipal ahora confió la asesoría externa a Luis Barraud, uno de los propietarios de Viña Cobos.

Al respecto, Santiago Santamaría, gerente comercial de Melipal, agregó que "el terroir es un área geográfica específica, pero también es el equipo humano y el manejo del viñedo. Acá tenemos la virtud de poseer una diversidad enorme. Si bien todas las uvas son de Agrelo, tenemos plantas jóvenes, otras que tienen casi 90 años, parrales, espalderos de baja densidad... toda esa diversidad, cuando la llevás a la bodega, te da resultados realmente sorprendentes".

En la misma línea, Irene Aristi destacó que "cada cuartel se cosecha diferente y va a distintos tanques. Toda esa trazabilidad te permite observar cómo, por el simple hecho de que una hilera pegada a la otra tiene un sistema de riego diferente, cambia completamente el estilo del vino".

Este objetivo de lograr dejar marcado a fuego el sello de Agrelo en una botella implicó también un cambio en cuanto a cómo comunicar la esencia de Melipal.
"En un comienzo, informábamos quiénes eran los protagonistas que estaban detrás de la elaboración de cada vino. Y eso fue muy positivo, pero ahora hablamos del ´equipo Melipal´. El enólogo es un miembro importante, pero es un engranaje más para mover toda la maquinaria de la bodega", destacó Santamaría.

Por su parte, Irene Aristi coincidió en que "apalancar la imagen en un enólogo es viable únicamente cuando él también es dueño de la bodega. Pero ese no es nuestro caso. Acá hay muchos trabajo atrás y de muchísimas personas para que el vino llegue al consumidor".

Incluso, Santamaría aseguró que "como proyecto de empresa hasta sería débil que el protagonista sea el enólogo estrella, porque si un día cambia de proyecto, ahí tu marca se desplomaría. Por eso nosotros preferimos sustentar las fortalezas bajo el paraguas Melipal, mucho más allá de los nombres".

Consolidando la marca
 

Irene Aristi destacó que "estamos en el camino de crear una marca. Queremos que cuando alguien nos nombre, a los consumidores les resulte conocido. Y atrás de eso que se encadenen los buenos vinos y una buena forma de trabajo".

"Todo esto sabemos que se logra a largo plazo. Estar en el inconciente coletivo no es fácil, pero sabemos que podemos lograrlo", apuntó.

Santamaría coincidió y recalcó que "podés estar en boca de todos con una buena inversión en marketing. Sólo es cuestión de tener los fondos. Pero nosotros queremos que esto esté relacionado con la calidad, para que sea más sólido y toda la estructura no se caiga en el momento en que dejás de inyectar dinero, sino que se mantenga en tanto y en cuanto sigas haciendo buenos vinos".

En este sentido, Clarisa Aristi, brand manager de Melipal, destacó que "en el negocio del vino no teníamos el apellido ni 400 años de historia. Todo esto lo estamos construyendo con el trabajo diario. Pero el tema de la tradición no nos preocupa. Podés tener toda la trayectoria pero basta que una generación no respete la calidad para tirar todo por la borda. Por eso, para nosotros, en esta industria no importa tanto si sos viejo o nuevo. Importa trabajar y lograr la máxima calidad posible. Esa es nuestra filosofía".

Salud!
Fuente: iprofesional.com

No hay comentarios:

Publicar un comentario